A la mitad del camino no hay nada para nadie.
Hay dos punteros que se arañan y muerden por cualquier punto porcentual, pero mientras ellos se exhiben como pendencieros, calladito calladito Pepe Yunes se cuela como una opción viable.
La realidad es que en Palacio hay nerviosismo y no es fortuito que hayan quemado el último cartucho: Karime Macías.
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Y también es real que Cuitláhuac García sólo aprieta el paso cuando está en Veracruz López Obrador, tanto que en plena campaña se da el lujo de ligar en cafés capitalinos (nada malo tiene, obvio, pero si no se enfoca en una campaña qué se puede esperar de enfoque en un gobierno).
Por su parte, como bien apuntan Agustín Contreras Stein y Edgar Hernández en sus últimas columnas, a media jornada nada está resuelto.
Pepe Yunes, con una campaña austera y de bajo perfil, ha ganado muchísimo terreno, le duela a quien le duele, y como dirían los clásicos… ¡Aunque Usted, no lo crea! |
