Guadalupe Osorno enfoca mal sus prioridades y no logra que Protección Civil deje de ser una dependencia reactiva

En Veracruz Una cosa no se le puede escatimar a la Secretaria de Protección Civil, Guadalupe Osorno Maldonado, y eso es su empeño y trabajo. 

Su misma fisonomía habla del cansancio al que está expuesta pues Veracruz (compare la foto de cuando estaba como diputada y la de ahora), a todo lo largo y ancho del Estado, es un verdadero polvorín de problemas. Cuando no son los incendios forestales son los choques catastróficos como el de Maltrata o sencillamente ir a cuidar los eventos como el Salsafest. 

Sin embargo, a este paso difícilmente podrán alcanzar la visión que tienen de la dependencia y convertirla de una Secretaría Reactiva a una Secretaría Preventiva. 

Basta ver los boletines de prensa emitidos por Comunicación Social para ver en qué ocupan la mayor parte de sus esfuerzos en Protección Civil. La inmensa mayoría son de respuesta a tragedias sin que hayan logrado aterrizar la funcionalidad de los famosos Mapas de Riesgo que son solo prontuarios de buenas intenciones y cartas a Santa Claus. 

¡Ahhhh! ¡Eso sí! En los últimos meses aparte de apagar incendios y accidentes, sólo se ha informado oficialmente acerca de la lucha por la perspectiva de género e incorporar el lenguaje no sexista en las actividades de la dependencia. 

Busca Guadalupe Osorno fervorosamente el combate a los estereotipos y hasta se acercan a los medios de comunicación para sensibilizarlos en torno a los estereotipos de género comunes, desde la tradicional “chica del clima” hasta las recomendaciones a las mujeres para desarrollar actividades domésticas porque “el día está soleado”. 

¡Ahhhh no bueno! Con eso resuelven el problema. 

¡Ojo! Nadie dice que Osorno no trabaje… solo que tal vez esté rebasada en cuanto a los recursos disponibles y las necesidades de Veracruz o sencillamente está disipada actuando de apagafuegos y modificando el lenguaje incluyente en lugar de prevenir los desastres.