Úbeda Sierra señalo, que este hábito produce consecuencias negativas (individuales, familiares y sociales), entre ellas modificaciones a la conducta relacionados con los cambios del estado de humor hasta autolesiones, psicológicas baja autoestima y percepción errónea de la realidad, cambios en el funcionamiento del cerebro relacionadas con el manejo de estrés y autocontrol.
También subrayó la importancia de realizar actividades con la familia en casa, tales como: juegos de mesa, actividad física, pintura o manualidades, ya que esto, genera una mayor integración y por consecuencia el reforzamiento de lazos y vínculos que ayuden a prevenir y detectar conductas de riesgo.
La primera intervención se ofrece en las Unidades de Medicina Familiar (UMF), en donde el médico puede identificar signos de consumo, lo que le permite programar consejería médica y/o sesiones psicoeducativas para informar sobre los riesgos a la salud física, psicológica y social que conllevan las adicciones.
En tanto, quienes presentan consumo moderado y grave se refieren a la consulta de Psiquiatría de los hospitales de Segundo Nivel de Atención para su tratamiento.
Finalmente, informó que ante cualquier duda sobre el tema, es necesario acudir a su UMF más cercana, donde se cuenta con personal capacitado para brindar la mejor atención y para orientación médica telefónica en salud mental pueden llamar al 800 2222 668. |