La tasa de desempleo es muy útil para conocer la proporción de los mexicanos que no están trabajando mediante una fórmula que mide la población de 16 años y más, que no está trabajando y busca trabajo, dividido entre la población económicamente activa de 16 años y más, esto es, ocupados más desocupados.
La fórmula aritmética que se utiliza para calcular la tasa de desempleo es sencilla y divide el número de desempleados, entre la población activa y se multiplica por 100.
El tema es que quizá por el desconocimiento, de buena o mala fe, se publican artículos en los medios en los que si bien se dan a conocer las cifras oficiales del INEGI, se utilizan adjetivos catastrofistas fuera de la realidad.
Algunos articulistas titulan que el 3% de desempleo que logró el país en el mes de enero de este año es lo peor que le podía pasar a México, cuando en realidad eso no es lo real, puesto que en primer lugar fue menor al del mismo mes del 2022 que llegó al 3.7%.
En el país, la Población Económicamente Activa de personas con más de 15 años ascendió a 60.2 millones comparada con los 57.7 de enero del año pasado, representando una tasa de participación económica de 60.3% y el incremento de 2.5 millones de personas en la población activa respecto a datos de 2022 según el INEGI.
También vale la pena señalar que a finales del 2022 en México la tasa de desempleo registró el nivel más bajo de los últimos 17 años -desde el 2005- al ubicarse en 3.01 por ciento en el mismo mes, según cifras del INEGI.
Hay que decir, sin embargo, que en el 2022 hubo altibajos en este indicador ya que el febrero se registró una tasa de desempleo del 3.72%, que fue el más alto del año, y el 3.0 % que se registró en noviembre.
Así, hay que tener cuidado al leer comentarios quizá dolosos, quizá de buena fe, pero que no concuerdan con la realidad o cuando menos no dan una idea clara de lo que está pasando en México. |