Destacó que otra de las maneras en que el canal auditivo se pueda tapar es al intentar limpiar el oído con hisopos de algodón, horquillas, el dedo o cualquier otra cosa, debido a que al intentar quitar el cerumen este es empujado y se acumula más profundo, además en este proceso se puede llegar a lastimar el tímpano hasta hacerlo sangrar.
Explicó que la limpieza del oído se lleva a cabo por mecanismos naturales, a través de unas pequeñas vellosidades ubicadas en el conducto auditivo, médicamente llamadas cilios, las cuales al estar en movimiento realizan un barrido de la basura que pueda ingresar a dicho órgano.
El director del hospital refirió que al crear tapones de cerumen, este puede ocasionar problemas como zumbidos en los oídos (tinnitus), sensación de llenura en los oídos o vértigo y aunque la mayoría de personas quieran limpiarlo a profundidad, por cuestión de higiene y estética se aconseja solo hacerlo por la parte exterior.
Añadió que la correcta limpieza de oídos evita muchos problemas relacionados con la audición y con enfermedades como la otitis u otras infecciones e inflamaciones; agregó que para cuidar los oídos también es importante evitar la sobreexposición a fuentes de sonido demasiado elevadas, abuso de auriculares y de aparatos externos.
Finalmente, el médico dijo que en caso de presentar molestias, lo recomendable es acudir a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) para que el médico realice una adecuada valoración y en caso de necesitarlo canalizarlo con el especialista. |