Juan Manuel Diez Francos, el alcalde priista mejor evaluado y reconocido de Veracruz, no suele tener pelos en la lengua. Le llama al pan, pan… y al vino, vino.
Si en estos días hubiera sucedido algún lamentable evento como los de hace unos días en el Norte del Estado, las computadoras de ciertos medios locales y nacionales estarían echando humo por tanto teclazo recibido para destacar la gravedad de la situación.
Pero como decían los clásicos del Estado de México, las buenas noticias casi no se cuentan, pero cuentan mucho.
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En Orizaba se dieron dos hechos importantes. La inauguración por parte de la Gobernadora Rocío Nahle de la Ciudad Judicial de Orizaba, el complejo más grande de Veracruz, y que el alcalde de Orizaba, Juan Manuel Diez Francos, no escatimó en elogios a la gobernadora.
Diez Francos dijo en público: “Quiero aprovechar, gobernadora, para darte las gracias. Sé que a lo mejor no es el lugar, pero sí quiero darte las gracias del pueblo de Orizaba, ¿Por qué te doy las gracias? Y sí, lo digo abiertamente, porque el gobernador anterior se olvidó de Orizaba y tú estás repartiendo las cosas justamente para todos, somos veracruzanos, orgullosamente", expuso.
El apoyo de Nahle a Orizaba no es nuevo, incluso desde la campaña se hicieron compromisos y antes de tomar protesta como Gobernadora, algunos de estos ya se habían cumplido. Para lo anterior, Cuitláhuac García tuvo el buen tino de, cuando menos, no bloquear los apoyos de Nahle y Orizaba fue noticia nacional con la introducción de una flotilla completa de autobuses públicos, completamente gratuitos, entre otras cosas.
Cuando el apoyo y los reconocimientos llegan de la gente de casa y del mismo partido, se diluye la relevancia. Pero cuando estos llegan de personajes sin ambages como Diez Francos, que encima es de un partido de oposición, entonces vale la pena destacarlo porque mucha verdad debe haber.
Tampoco se trata de que alguien de Morena se quiera colgar del desarrollo de Orizaba para posicionar su imagen política. Ese municipio ha hecho bien las cosas con los gobiernos estatales o aun en contra de ellos.
Pero cuando se jala hacia el mismo lado, la carreta se desliza más fácil. A esto es cuando se refieren los políticos al llamar a cerrar filas en favor de Veracruz. No se trata de convertir cualquier evento en un mitin político lleno de aplausos, sino de trabajar de forma coordinada para aterrizar proyectos, desarrollo y justicia social. |
