Las palabras de la Presidenta calaron fuerte al interior del Verde, pues a juicio de ellos se trató (y lo fue), de un revés hacia una reforma que el propio ecologista promovió y defendió, a pesar de las críticas negativas que un buen sector de la población propinó.
Tan fuerte pegó en el Verde la opinión en contra de Sheinbaum a la “Ley Esposas”, que el mismísimo Manuel Velasco, el ecologista más afín a la presidenta, salió a defender la reforma en San Luis Potosí, afirmando que camina de la mano con la paridad de género, sin tratarse de un asunto pensado para beneficiar a la esposa del gobernador.
El Verde siempre ha estado ligado al partido dominante, y es capaz de “micro pelearse” (sin estirar mucho la liga), con su aliado dominante para preservar el poder en algunos estados, en el afán de continuar cobrando posiciones a cambio de su aporte en votos por zonas.
Y si a esta disputa por la “Ley Esposas” le sumamos la que ocurrió al arranque del sexenio (con la iniciativa de Sheinbaum contra el nepotismo), y que el propio Verde en el Senado logró “aventar” hasta el 2030 para no perjudicar sus candidaturas en el 2027, estaríamos hablando de dos señales claras de ruptura entre estos dos “cada vez menos aliados”.
Veremos qué ocurre, y si de verdad ocurre.
X: @aaguirre_g
(COLUMNA "AL RESPECTO") |