.- El gran dilema del PRI es que nadie quiere ser candidato uninominal.
El “partidazo” no garantiza triunfos, es una inversión demasiado riesgosa: una aventura.
Los priistas dicen estar quebrados, lo que lograron amasar es “sagrado”, ‘Eso no se toca’.
¿Meterle dinero “bueno” al malo? ¡Ni loco!
En la muni... |