Hace como treinta años, cuando llegamos a Alto Lucero a bordo de un par destartaladas avionetas, acompañando al candidato del PRI al gobierno, don Fernando Gutiérrez Barrios, para el staff de periodistas que aceptó viajar a cubrir el evento en uno de los municipios más cercanos a Xalapa, pero inaccesibles, fue una odisea. El tramito de El Lencero a el Alto se hizo eterno, abajo rocas y enormes hondonadas, cuando aterrizamos el alma nos regresó.
Hubo un mitin muy corto de apoyo al candidato y de ahí a un salón social. La mecánica de la campaña fue esa, al concluir los discursos las vivas y los aplausos a chambear en lo que eran las peticiones de los votantes que hacían directamente a Don Fernando. El candidato escuchaba con paciencia a los ciudadanos y pasaba la petición que llevaban por escrito a Guillermo González Días, o a Armando Méndez de la Luz, auxiliares cercanos al candidato quienes se encargaban de clasificar las peticiones y hacerlas llegar a quienes ocuparían los cargos en el equipo de “El hombre leyenda”.
La fila de alteños sería de unas cien personas pero, luego de pasar los primeros diez y plantear la misma situación, Don Fernando se apartó de la mesa de atención ciudadana y habló fuerte: ¿Hay quien tenga una petición distinta a la construcción de la carretera a Xalapa?... se hizo un silencio y Gutiérrez Barrios volvió a intervenir: siendo así y tras cuarenta años de venir solicitando esta obra que conectará a productores y ciudadanos en general con las grandes ciudades, me comprometo a que esta será la primera obra de mi gobierno: basta de esperar más tiempo.
Y tal como lo dijo, los primeros días del gobierno de este político ejemplar, se comenzaron a hacer los trabajos que concluyeron en unos meses, de tal forma que fue Gutiérrez Barrios quien inauguró la obra hecha con materiales de primera gracias a lo cual en veinte minutos nos poníamos en Alto Lucero o viceversa, cuando antes eran cuatro horas las que hacían los que estaban obligados a ir o regresar, en ese tramo, por lo que en agradecimiento los alteños decidieron ponerle el nombre del gobernante al municipio y en una sesión del Cabildo lo hicieron, por eso lleva el nombre de Alto Lucero de Gutiérrez Barrios Veracruz, ese pintoresco lugar, cuna de hermosas mujeres y lugar donde nació la popular cantante “Paquita la del Barrio”.
Todo por servir se acaba
Y fueron muchos años los que estuvo en servicio el tramo carretero Alto Lucero-Xalapa, beneficiando a miles de habitantes de esa región y personas que tenían que viajar hacia la cabecera municipal que gobernaron en distintos tiempos Carlos Francisco Mora Domínguez y Gonzalo López Barradas, entre otros amigos, hasta que como se dice, dio se si, o sea se fracturó y tuvo que entrar en acción la 4T para repararla, por cierto la rehabilitación de la carretera Alto Lucero – Cerritos de Díaz – Jacales – El Madroño, tardó solo 6 meses en destruirse después de haberse tardado el gobierno de Cuitláhuac García ¡dos años en construirla! y promoverla como una "gran obra" de su grisáceo y corrupto gobierno. En marzo del 2021, Cuitláhuac García Jiménez usó sus redes sociales para dar a conocer la obra y destacó “la calidad” con la que se edificó la carretera que se hizo en tres etapas.
La inversión total de la obra fue de veinte millones 334 mil pesos, y la empresa responsable de la obra fue Construcciones Pale Ríos, SA de CV, de reciente creación y ligada a funcionarios estatales, los más corruptos que hemos tenido en toda la historia. El pasado 14 de septiembre, apenas seis meses después de que la obra fue inaugurada con bombo y platillo por Cuitláhuac García, se dieron a conocer las fotografías en las que se ve la carretera de concreto totalmente destrozada.
Desde el Gobierno del Estado han intentado hacer ver que los desperfectos en dicha carretera fueron por causas del "huracán Grace", cosa que es totalmente falsa, ya que la realidad es que dicha obra resultó de cartón, repleta de corrupción, y tan sólo duró seis escasos meses. Cuitláhuac García subía en el mes de marzo un video en el que destacaba que en compañía del titular de la SIOP, Elio Hernández y la diputada federal Claudia Tello hacía supervisión de trabajos de la obra, o sea paseaban por ahí porque además de ignorar todos los asuntos técnicos de una obrita de estas carecen de oficio político para difundir adecuadamente lo poco y malo que hacen.
Hasta ayer los habitantes de Alto lucero siguen aislados gracias a las porquerías que les hicieron con la reconstrucción de su vital carretera.
El chile que se comió el gobernador
Hay diferentes versiones acerca de la aparición de los chiles en nogada en la mesa mexicana. Sin embargo, se sabe que data de 1821, año en el cual Agustín de Iturbide firmó el Acta de Independencia de México y de los Tratados de Córdoba.
Hay quienes afirman que fueron las madres agustinas del Convento de Santa Mónica en Puebla las que, al saber que don Agustín estaría en esa ciudad para celebrar su santo, el 28 de agosto, decidieron elaborar un platillo que recordara los colores de la bandera del Ejército Trigarante.
Por ello optaron por el verde, blanco y rojo. Además, siendo justamente el mes en el que en ese estado se cosechan las nueces de Castilla y las granadas, se les ocurrió, después de mucho pensar, hacer esta maravilla de platillo, o sea el origen de este manjar es eminentemente real, no se trata de un antojito típico de la cocina mexicana, en todo caso lo más común para cenar el 15 de septiembre es el pozole, con patitas de cerdo y tostaditas acompañado de un tequila, de la marca que sea. Pueden ser también unos tamalitos, unas enchiladitas, algunas picaditas (de masita), tostaditas con frijoles, lechuga, queso, jitomate y salsa de chile seco con una paloma de pulque curadito o así como si fuera agua miel, en fin hay mucho para cenar al alcance de nuestros paupérrimos bolsillos, pero ¿chiles en nogada?, de esos que la tía Duly estuvo ofertando en ¡doscientos!, cada uno, no, para eso solo tienen los ricardos, los fifís, los conservadores que se han corrompido para hoy competir con Carlos Slim.
Esto lo comentamos a propósito de un video que los ¿colaboradores? de Cuitláhuac García subieron a las redes el día quince con un texto que lee el gober diciendo que había aprovechado un tiempecito para no dejar pasar la oportunidad de degustar un chile en nogada, el platillo típico de la cocina mexicana en estos festejos patrios. Pero que re majes, no escarmientan, ¿cómo se les ocurre ofender así al pueblo?, pues sí esos son los alarmantes niveles de improvisación que tenemos en las dependencias. El chile en nogada lo consumen en estas fechas los adinerados, es el platillo más caro que hay, no jodan.
Hasta siempre maestro Mejido
Ayer nos enteramos a través de NOTIVER de la triste noticia: a los 89 años murió en la Ciudad de México, el periodista veracruzano, Manuel Mejido, que fue considerado el siglo pasado por la revista Times como el reportero más influyente de México. Según la Organización Editorial (OEM), en donde laboraba, su deceso se dio cerca de las 23:00 horas de ayer sábado, por causas derivadas de su edad.
El comunicador era uno de los más reconocidos desde la década de los sesenta, incluso, contemporáneo con otras personalidades de ese oficio como Manuel Buendía.
Se inició como cronista taurino en el semanario dominical Claridades (1954-1956), donde fungió como jefe de información. Colaboró en Ruedo de México y en Revista de Revistas, donde fue jefe de información (1960-1963).
Trabajó en la revista francesa Paris-Match. Realizó numerosos reportajes sobre el país y fue corresponsal de guerra de Excélsior en Argelia, Vietnam, el Medio Oriente y reseñó el Golpe de Estado de Augusto Pinochet, en Chile.
Fue subdirector de El Universal y de El Universal Gráfico, donde publicó sus columnas Alto Poder y Universo Político. Participó en programas de televisión como “Charlas de Café” y “De cara al público”. Desde 1996 hospedó su columna Alto Poder en las páginas de El Sol de México que se publica en todos los diarios de la Organización Editorial Mexicana. Su última colaboración fue la de este viernes titulada “AMLO falló al invitar a Díaz Canel”.
REFLEXIÓN
Los latinos somos por naturaleza liberales, trovadores de veras, humanistas y condescendientes con nuestros semejantes; nunca socialistas por dogma.
Simpatizantes del líder revolucionario Fidel Castro, pero críticos del dictador cubano.
Condenó al heredero castrista Miguel Díaz Canel, represor hasta la muerte física y civil del pueblo de Cuba.
Su presencia en nuestras fiestas patrias, es una afrenta al pueblo de México. Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx | formatosiete@gmail.com |