Agrupaciones Ecologistas de los Tuxtlas y de diferentes puntos de la entidad, están censurando la insensibilidad y desinterés del Gobierno de la Cuarta Transformación de Veracruz, por su total indiferencia en contra del ecosidio que se está registrando en la Biosfera de los Tuxtlas, sobre todo en las faldas del Volcán de San Martin y en la Sierra de Santa Martha, reductos de la naturaleza que están siendo víctima de los Tala Montes y de los Traficantes de animales silvestres que están en vías de extinción.

En la Biosfera de los Tuxtlas, la cual están encuadrados varios municipios incluyendo San Andrés Tuxtla, Catemaco y Santiago Tuxtla, en esta zona se echaron andar proyectos productivos  para que los campesinos sigan viviendo  en estos lugares y de esta manera  cuiden y vigilen celosamente los recursos naturales del último reducto de las Amazonas, sin embargo no todo está marchando bien porque gracias a la Pandemia  y los serios  impedimentos socio económicos que está trayendo consigo este asunto sanitario, existen en estas selvas naturales, problemas de deforestación y el tráfico de animales silvestres.

La situación ecológica en esta parte de Veracruz, es de gravedad, basado a que gracias a la deforestación de los Tuxtlas y la Sierra de Santa Martha, está en riesgo la producción de la Presa Yuridia del municipio de Tatahuicapan, la cual abastece del vital líquido a Coatzacoalcos, Minatitlán y otras poblaciones del sur de la entidad y aunque el Gobierno de Cuitláhuac García Jiménez, desdeñe este dificultoso asunto la situación es complicada.

Ante esta situación urge que el Gobierno de Veracruz, proponga al nuevo Congreso Estatal, se endurezcan las leyes ecológicas y exista un buen presupuesto  para que los municipios que están dentro de la Biosfera de los Tuxtlas, tengan recursos para respaldar a los habitantes de estas áreas protegidas y de esta manera sus habitantes cuiden y multipliquen los recursos naturales  y no  sigan acabándose  por hambre y miseria, los recursos naturales  a través de la  tala de árboles y la venta  de animales silvestres que están en vía de extinción, pero en los Tuxtlas la naturaleza no se quiere morir.      

En otro asunto diremos que allá en el municipio de Hueyapan de Ocampo, veremos como Juan “Jona” Cazarín Martínez, sortea las decisiones de su gobierno municipal, Jona como también se le conoce al futuro alcalde de esta población, tendrá que demostrar de que esta hecho, por lo que seguramente sacara fuerza de su pasado para cumplirle a sus paisanos.

El nuevo Presidente Municipal, no debe fallarle a una generación que continuamente reclama espacios, por lo que deberá taparle la boca a quienes dudan de su capacidad para desarrollar un buen gobierno, no puede haber equivocaciones y lo sabe él perfectamente.

Juan Jona es un político diferente a la mayoría, el hombre tiene peso e interlocución dentro y fuera su partido y eso le dio un margen de maniobra que no tuvieron muchos, al lograr conciliar con todo el mundo político de esta demarcación, quienes finalmente se unieron a su proyecto político, para que fuera su alcalde municipal.

Juan Jona Cazarín Martínez, tiene que meterle toda la enjundia y los conocimientos para salir adelante, todo dependerá de su fortaleza, cordura y tacto para lograr con el cerebro y no con las vísceras, ni mucho menos con el corazón, para salir adelante en esta difícil e importante misión política.

Lo cierto es el nuevo munícipe de Hueyapan de Ocampo, tiene un claro conocimiento de las necesidades de Hueyapan de Ocampo, así que el fresco Edil tendrá que cumplir las perspectivas de quienes confiaron en su proyecto político de color Moreno.

Y nos vemos en la otra.    

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