La primera edición de la Cumbre Tajín según recuerdo, fue en la primavera del año 2000, en pleno periodo gubernamental de Miguel Alemán, todo aquello bonito y de mucho nivel, la finalidad sustantiva de aquel festival, fue preservar la tradición y difundir la riqueza cultural del pueblo Totonaca, la verdad que el ingeniero Everardo Souza, Fernando Vázquez y el contador Mauricio Guillaumin, siempre tuvieron una idea muy clara de los festivales y con el apoyo de la experiencia en Televisa del gobernador Alemán, ni se diga, aquellos festivales fueron todo un éxito.
El Festival trajo consigo, muchísimo desarrollo económico en la zona, el pueblo papanteco se vio favorecido con la festividad, los hoteles, restaurantes y prestadores de servicios turísticos de la zona, permanecían más de un 10 días abarrotados, vinieron artistas del tamaño de Pet Shop Boys, The Smashing Pupkins, Blind Melon y hasta Los Tigres del Norte, pasando por Juanes, Julieta Venegas, Café Tacuba, Jaguares, Molotov y toda la cartelera local de la Universidad Veracruzana, ¡Un sueño!.
En aquellos años, recuerdo al director del festival, Salomón Bazbaz, un hombre super organizado y minucioso, que tenía una logística casi militar, el primer año fue un éxito todo aquello, sin embargo el segundo año en el 2001, hubo aquel incidente, en el que un entarimado colapsó y varias personas resultaron heridas, justo antes de dar inicio el festival, sin embargo se logró superar el asunto y hubo tres ediciones más, con muchísimo éxito.
Sin embargo y como no hay mal que dure cien años, ni bien tampoco, llegó Fidel Herrera Beltrán y con el la cosa empezó a ponerse mucho más sencilla, los talleres, carteles artísticos y festividades continuaron, pero las cuentas ya no les salían; ya con la llegada de Javier Duarte de Ochoa y la prima Brenda Tubilla ¡Ni les cuento! A partir de ahí, no hubo ni un pinche quinto partido en dos, para la Cumbre Tajín, todo se lo embolsó la prima y el festival como la tarima, colapsó.
Con el mal humor y la amargura eterna de Miguel Ángel Yunes Linares y su mediocre secretario de turismo, la Cumbre Tajín pasó desapercibida, fue con la llegada de Cuitláhuac García que han retomado, el primer año ni me enteré si hubo algo, luego con la pandemia se suspendió y hoy pretenden hacer su cumbrecita, para apoyar el desarrollo económico de la zona, pero bueno ni Veracruz está pa’ esos gastos, ni hay muy buen gusto musical, ni mucho menos contactos internacionales, así que del 18 al 20 de marzo, harán una celebración muy sencillita y austera, allá en el Parque Takilhsukut, que contará con la visita de doña Rigoberta Menchú, como plato principal y el cantante favorito del líder, amigo y diputado, Juan Javier Gómez Cazarín: Nelson Kanzela, además de Matute e Intocable.
¡Pues bueno! Ya como quiera lo armaron y salieron del paso, ¡A Dios gracias! Que aún hay algo y al menos será dos días en que los vendedores de jícamas con chile, chicharrones y aguas de frutas de la zona, harán su agosto, que buena falta les hace.
Cosas de la vida y menudencias
Mis paisanos del alma, andan que se los lleva la China Hilaria y es que en Tlacotalpan a todo el pueblo le llegó el agua, como si fuera fuego y ayer un centenar de quejosos, marcharon hasta las oficinas de la CAEV en Tlacotalpan, para poder dialogar con el jefe de oficina, un tal a Guillermo Rodríguez Domínguez, quien ante la presión de mis paisanos, tuvo que salir a pelear con los afligidos y aclarar que el aumento al costo del servicio, era una orden directa de la Comisión del Agua del Estado de Veracruz en Xalapa a cargo de un señor Ladrón de Guevara.
¡Vaya! Que terrible que no se escudara en el consumo de agua y alegara órdenes superiores, antes no dijo que eran órdenes del gobernador García Jiménez ¡Caray!.
Así las cosas mis hermosos, nos leemos mañana.