Ante el descontón del 50 por ciento de las prerrogativas, Sergio Gil Rulllán propone: ¡Piso parejo! Por su parte, el dirigente de Morena, Esteban Ramírez Zepeta, habla de la reducción de las prerrogativas a partidos como un logro de la Cuarta Transformación… ¡mi vido!

Si hubiera que ponerle apellido al niño, sería Kumamoto y entonces habría que recordar ese Hashtag #SinVotoNoHayDinero… pudiéramos decir que al menos en este siglo, el papá de los descontones es Kumamoto y Movimiento Ciudadano, el abuelo… le cuento:

Allá por 2017, Pedro Kumamoto, entonces diputado local de Jalisco, se apersonó en San Lázaro para presentar una iniciativa que pretendía modificar el cálculo para el financiamiento de los partidos políticos a partir del #SinVotoNoHayDinero; es decir, de acuerdo al número de votos, esto es lo que recibes, y no a partir del Padrón Electoral… en ese tiempo se calculaba una reducción hasta del 59 por ciento del presupuesto de los partidos políticos por año y tasaban el ahorro a más de 2 mil 200 millones de pesos…

En Jalisco, la propuesta de Kumamoto fue aprobada por la principal fuerza, Movimiento Ciudadano, que impulsó con todo esta propuesta; en San Lázaro, curiosamente, los tiempos electorales “se les vinieron encima” y fue imposible llevarla al voto…

Y mientras en el Congreso de la Unión, el PRI cerraba las puertas a esta propuesta, en Jalisco (otra vez Jalisco) el Gobernador Aristóteles Sandoval (+) hablaba de proponer una iniciativa de ley para que los partidos políticos no recibieran financiamiento en año no electoral y que esos recursos fueran destinados al Fondo de Contingencia para la Economía Familiar 2017 y así mitigar los efectos negativos del gasolinazo.

Al final, si no mal recuerdo, sólo la propuesta de Kumamoto se aprobó.

Ahora, con la reducción al 50 por ciento de las prerrogativas, impulsada por el partido en el poder, habría que preguntarse una cosa: es justicia o es castigo. Digo, porque estando en el poder, con el manejo de los recursos de 22 estados del país, así como del Gobierno federal, quitarle al partido del sistema el 50% de sus recursos, como que económicamente es un pelo de gato… en cambio sí será un golpe drástico al resto de los partidos que es seguro que al inicio del 2023, tengan que prescindir de personal para subsistir. Y no es por amargarles la lectura a los amigos del PAN y del PRI, pero quizás les pegue más fuerte… digo, si bien el Revolucionario Institucional viene ya remando contra la corriente desde hace algunos años, por deudas, laudos y demás, en el PAN habrá que ver cómo lo toman y cómo lo resienten…

Por eso la propuesta del dirigente estatal de Movimiento Ciudadano, Sergio Gil, se vuelve interesante: ¡Piso parejo! ¿Cómo? Esta idea la trae MC desde 2015: que el financiamiento no lo manejen los partidos, sino el Instituto Electoral dado a que las cosas que más le cuestan a los partidos es la administración del recurso en sí, que lo obliga a tener Tesorería, Contraloría, además de Auditorías, órganos de transparencia, que el INE ya tiene; agregue a ello el planteamiento de “reformular” la fórmula 30-70, el 30 por ciento se reparte de forma igualitaria, y el resto, en función de tus votos. Pues Movimiento Ciudadano plantea que sea al revés: 70% igualitario, y el resto, en función de votos para tener un arranque más parejo en las elecciones.

El cálculo de Kumamoto se me hace interesante: de acuerdo al voto, la marmaja… la idea de Movimiento Ciudadano, bien concretada en ¡Piso Parejo!… y es cierto, la proyección de Marlon Ramírez Marín, dirigente del PRI estatal, de hacer el Voto Obligatorio no encaja con el tema de las prerrogativas, pero bien pudiera ser parte de armar un mejor proyecto donde se incentive tanto la participación ciudadana a la hora de las elecciones como equilibrar las justas electorales, porque quitar el 50% de las prerrogativas a los partidos, aunque parece bueno, plausible, justo, no deja de ser ventajoso para Morena porque ellos traen el pandero… dijera Kiko: ¡Huy, así que chiste!

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