De cierto modo, como que se quiere cristalizar esa leyenda negra que desde el 2016 y 2018 empezaba a sonar, ya fuera a nivel nacional como local, aquí en Veracruz: el PRI-Mor.
¿Recuerdan a Héctor Yunes señalando a Javier Duarte de apoyar a Cuitláhuac? ¿Recuerdan el papel de los legisladores del PRI de la pasada Legislatura coqueteando con Morena?
¡Vamos! No hasta en una entrevista al entonces diputado priísta Jorge Moreno Salinas, éste declaraba que si hubiera la oportunidad del otrora Partidazo para hacer alianza con Morena, se tendría que hacer… “Yo soy priista, pero he coincidido en temas con Morena en el Congreso”... y lo demostró cuantas veces fueran necesarias.
Digo, no se trata de ser “Contreras” nomás porque sí, pero al interior de partidos, militancia, ideología, se pretende que sean “congruentes” con la camiseta de “Oposición”.
Hace unos días, el mismo Moreno Salinas (quien en sus apellidos hay paradoja) hablaba de aliarse con Morena ante la crisis que vivía el partido… algo así como a situaciones extremas, medidas extremas… o lo que en buen cristiano se diría: ¡A chingar su madre la ideología! ¡Hay que sobrevivir!
Hay quienes se escandalizaron con la sola mención de esta alianza, de este PRI-Mor… ¡por Dios! pero hemos visto pasar la alianza PAN-PRD… hemos visto pasar la alianza PAN-PRI-PRD… hemos visto pasar la alianza hombre con hombre y mujer con mujer… ¿y se escandalizan con la posibilidad de que el PRI-Mor se haga realidad?
A lo mejor sea muy aventurado hablar del PRI-Mor y sea más prudente mejor hablar del PAN y de Movimiento Ciudadano, partidos que en sus escaños de la Cámara Alta, se quedaron chiflando en la loma…
¿Será tiempo pues, para que estos partidos, Acción Nacional y Movimiento Ciudadano, vayan pensando en la combinación de fuerzas?
La idea de esta alianza no es nueva, al menos en Veracruz… en el 2018 participaron juntos con el PRD… a nivel nacional creo que sería la primera vez que se pensara en ello… digo, las circunstancias que se vivieron recientemente en las curules federales y luego en los escaños, y con dos años aproximados para ir conformando una nueva Oposición que aglutine a esos priístas y perredistas que estén inconformes con sus dirigencias y/o representantes en las máximas tribunas, obligan a pensar en ello…
Sí, uno recuerda al menos en Veracruz, que su dirigente, Sergio Gil Rullán, está firmemente casado con la idea de ir solos al 2024… pero las circunstancias pueden obligar a dar un golpe de timón en el Altiplano porque así, después de que la Alianza Legislativa valiera cacahuate, es necesario reconfigurar la agenda y ver qué tanto conviene mantener aliados o hacer nuevos aliados… a lo mejor, de la alianza Azul y Naranja, más que marrón salga una auténtica Oposición… a lo mejor… |