El gobernador Mauricio Vila Dosal y Andrés Manuel López Obrador sostuvieron una armoniosa reunión de trabajo en la que, además de reiterar el compromiso de seguir promoviendo obras, que detonen el desarrollo de Yucatán y el sureste del país, dieron seguimiento a los avances de proyectos estratégicos, principalmente de infraestructura, energías limpias, desarrollo portuario y el Tren Maya.
El Presidente de México ha ido nueve veces a Yucatán en lo que va del año. Es decir, una vez por mes, por lo que la reiterada amistad se convierte en confianza mutua.
En esta reunión de trabajo revisaron los proyectos como la construcción de dos plantas de generación de energía eléctrica de ciclo combinado en Valladolid y en Mérida, ambas resultado de las gestiones de Vila Dosal ante la Federación para garantizar el abasto de energía eléctrica, así como la ampliación del ducto Mayakán para garantizar el abasto de gas natural a la entidad y contribuir a disminuir el costo de las tarifas eléctricas.
Durante el encuentro con el Presidente, se adelantó que, la próxima semana, se firmará un convenio de colaboración con la Secretaría de la Marina para ampliar el Puerto de Altura de Progreso, mejorar las condiciones logísticas e incrementar las ventajas competitivas de Yucatán, además de la carta de intención con Fincantieri para construir el astillero más grande de toda América.
Es decir, el gobierno federal apoya de manera considerable el sureste, como se anunció desde la campaña del actual presidente, mientras que otros candidatos del PAN apoyan el proyecto. Las cúpulas de la oposición sólo muestran su pobreza mental y su carencia de proyectos congruentes, como es el caso del gobernador de Guanajuato, quien a pesar de estar contra la permanencia de los militares en las calles y su partido ser el más feroz enemigo de esta ampliación, inauguró 4 preparatorias militarizadas en su entidad, como uno de sus logros políticos. Estas actitudes definitivamente esquizofrénicas se debilitan a la oposición y principalmente al PAN que no hay día que tengas contradicciones grandes y graves.
La opción se ha entrampado en este tema más de lo que pudiera imaginarse. Por ejemplo, el PRI, cuyo polémico líder nacional de nombre Alito, dice estar contra esta ampliación de tiempo para la Sedena en las calles, se olvida que, en 1929, cuando se funda su partido a manos de un general, Plutarco Elías Calles; cuando en 1938, vuelve a cambiar de nombre, se realiza durante el sexenio de otro general, Lázaro Cárdenas, y cuando por fin se denomina PRI, en 1946, se hace en el mandato de otro general, Manuel Ávila Camacho.
La historia del PRI la forjaron los generales desde el primer día que surgió con el nombre de Partido Nacional Revolucionario. Falta de memoria, de instrucción, de capacidad de cultura política o de otra cosa.
En cuanto al agónico PRD que se dice defensor de la libertad de los mexicanos acaba de interponer el amparo número 50 contra la intención de que los militares permanezcan en las calles hasta 2028, porque aseguran que se niegan porque viola el proceso legislativo y el incumplimiento de consulta de los pueblos indígenas, pero cuando hay una consulta popular los perredistas son los primeros en rechazarla y cuestionarla.
Cuando el Presidente anunció la posibilidad de realizar una consulta ciudadana sobre la permanencia de las Fuerzas armadas, en materia de seguridad pública hasta el 2028, senadores del PAN y de lo que queda del PRD advirtieron que continuará el trabajo legislativo para votar la reforma constitucional señalando que no era necesaria la consulta.
Hace un año, Ángel Ávila, líder del PRD en la CDMX, aseguró que la ciudadanía no votó en la consulta popular por conciencia ciudadana, pues se trató de un instrumento que fue pervertido por el presidente y su partido. Quién les entiende.
Es por esto que hasta los más destacados militantes de la oposición como es el caso de Mauricio Vila, prefieren tratar con el Presidente de México que, con sus líderes partidistas, cuya cercanía los puede contagiar de incertidumbre y dudas.
En cuanto a la reacción veleidosa de Movimiento Ciudadano presentó una acción de inconstitucionalidad contra la reforma aprobada por Morena y sus aliados que entrega la coordinación de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, pero cada semana el gobernador emecista de Jalisco pide mayor número de elementos dela Guardia Nacional y del Ejército se dirijan a vigilar la entidad, porque la violencia, producto de complicidades y arreglos de las más altas autoridades de Jalisco, crece sin control.
Es natural, incluso recomendable el hecho de que los miembros de la oposición mantengan una relación de armonía con el partido en el poder y sus funcionarios. Sin embargo, la violencia verbal que practican algunos panistas contra la actual administración pública obliga a pensar que algunos políticos de oposición se entienden mejor con el actual gobierno que con sus propios correligionarios.
El PAN puede quedarse sin sus precandidatos ante la falta de solidez de su estructura partidista y el resto de los partidos de oposición no están mejor.
PEGA Y CORRE
El imberbe gobernador de Nuevo León, desesperado por no ser tomado en cuenta como presidenciable por el líder nacional de su partido, declara que ojalá que México se diera la oportunidad de tener un presidente de Nuevo León, lo cual lejos de pensar en que pueda convencer a Dante Delgado, puede pensarse que quiere salir de Movimiento Ciudadano.
Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes
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