Pese a los esfuerzos que el gobernador Cuitláhuac García Jiménez hace en el discurso por tratar de vender a Veracruz como uno de los estados más tranquilos del país, los números dicen lo contrario y la percepción ciudadana cada día que pasa es de mayor temor, de mucha inseguridad.
Y a esta percepción contribuyen con mucho los miembros de la banda que maneja la concesión de las grúas (atracadores con impunidad) y los elementos de las corporaciones de policía y tránsito del estado los cuales, sin el menor recato, se van en contra de quienes consideran les dejará “un billetito” y los extorsionan, sin tomar en cuenta las bandas dedicadas a asaltar a los comerciantes con el cuento del “derecho de piso” y quienes cometen los secuestros Express que no se acaba, al contrario.
De estas últimas modalidades de delitos (cobro de derecho de piso y secuestros) no se pueden tener registros porque ni los comerciantes extorsionados ni los familiares de un secuestrado se atreven a denunciar los delitos de que son víctimas por dos razones: no hay autoridad que les haga caso, que investigue los delitos, y por las amenazas que lanzan los delincuentes en el sentido de “actuar” en caso de interponer los afectados una denuncia. Por eso es que esos delitos no se ven pero como los sufre la sociedad.
Para ilustrar la terrible situación que estamos viviendo basta recordar que la violencia durante el fin del 2022 y el inicio de este año dejó, al menos, 38 homicidios en el país, y la mayor cantidad de muertos se registró en Veracruz.
El sábado 14 y domingo 15 en Veracruz se registraron 21 asesinatos, nueve de ellos se perpetraron en un bar de Poza Rica.
En Tijuana se cerró con siete muertos en el último día de 2022; En Sonora, los municipios de Guaymas y Cajeme registraron ayer las primeras ejecuciones, pues, hubo varios ataques que dejaron como saldo, al menos, cuatro víctimas de homicidio doloso.
En varios municipios de Nuevo León, tres personas fueron asesinadas de manera violenta. Por otra parte, el anterior fin de semana, en dos hechos diferentes en Acapulco, Guerrero, dos hombres fueron ejecutados, uno de ellos fue identificado como integrante de la Guardia Nacional.
La violencia durante el fin de 2022 y el inicio de este año dejó, al menos, 38 homicidios en el país, la mayor cantidad de muertos se registró en Veracruz.
Entre sábado y domingo en Veracruz se registraron 21 asesinatos, nueve de ellos como les contamos anteriormente se perpetraron en un bar de Poza Rica.
En Tijuana se cerró con siete muertos en el último día de 2022; En Sonora, los municipios de Guaymas y Cajeme registraron las primeras ejecuciones, pues, hubo varios ataques que dejaron como saldo, al menos, cuatro víctimas de homicidio doloso. Esa es nuestra dolorosa realidad, pobre Veracruz.
Más violencia durante elecciones
Las elecciones intermedias que se realizaron en el 2021, cobraron la vida de más de una docena de ciudadanos que estaban participando en el proceso electoral con la representación de partidos políticos diferentes a Morena. Otros que también participaban fueron intimidados y decidieron salirse de la contienda, lo que propició un ambiente de inseguridad y temor a lo largo y ancho del territorio veracruzano.
Mencionamos el dato de las elecciones del 21 porque ahora que Morena ha adelantado el proceso que sigue, el del 24, las desapariciones y ataques a prominentes actores políticos veracruzanos ha comenzado.
Por ejemplo, la Comisión de Búsqueda de Veracruz publicó la ficha de búsqueda de Julio César Gómez Obando, exalcalde panista del municipio de Naranjos Amatlán, quien fue visto por última vez el pasado 1 de febrero. De acuerdo con la Comisión, Gómez Obando, quien gobernó el municipio entre 2011 y 2014, desapareció en la localidad de Tamiahua.
La ficha advierte que la integridad física del exfuncionario puede encontrarse en riesgo, ya que podría haber sido víctima de un delito. Según reportes periodísticos, la familia de Gómez aseguró que el miércoles de la semana pasada, el exalcalde -de 54 años de edad- acudió a una sucursal bancaria de Tamiahua y posteriormente tenía previsto documentar una res en la Asociación Ganadera Local.
Tras realizar estas gestiones, pensaba volver a su domicilio, un rancho ubicado en Moralillo, pero nunca llegó. Los familiares creen que pudo haber sido privado de su libertad, ya que su teléfono celular fue apagado en torno a las 14:30 horas del día de su desaparición.
La ficha señala que Julio César mide 1.73 metros, tiene ojos color café oscuro, tez morena clara, cabello rizado corto de color castaño oscuro. También apunta que es de complexión delgada, tiene nariz recta y boca mediana.
El hecho se suma a otras acciones violentas en contra de políticos y exfuncionarios en la entidad. El pasado 22 de enero se reportó el asesinato de seis personas, entre ellas dos menores de edad. En los hechos murió Fernando Pérez Vega, excandidato a la presidencia municipal de Coxquihui, por el partido Fuerza por México, en 2021 y a quien también se le identificaba como jefe de plaza de un grupo criminal en El Espinal.
El viernes 30 de diciembre del año pasado fue asesinado a tiros el presidente municipal de Rafael Delgado en Veracruz, Isauro Ambrosio Tocohua. Los primeros reportes indican que el asesinato del edil se dio luego de que dejara un domicilio particular al que se dirigió para dar el pésame a una familia.
Asimismo, se informó que el político, quien había rendido su informe de labores antes, viajaba en su auto cuando un hombre le disparó en la cabeza.
Ese mismo día fue asesinado el tesorero municipal de Tezonapa, Salvador de Jesús Páez Tostado. De acuerdo con la Fiscalía estatal, el funcionario fue acribillado en la carretera Omealca-Yanga, a la altura de la localidad San José de Abajo, del municipio Cuitláhuac. En los últimos meses, Veracruz ha sufrido una oleada de asesinatos de funcionarios municipales. El 29 de noviembre fue ejecutado el regidor primero en funciones del Ayuntamiento de Texistepec, Enrique Argüelles Montero. Mientras que el 6 de diciembre mataron a tiros al síndico del Ayuntamiento de Omealca, Miguel Tinoco García.
El 16 de diciembre, el exalcalde del municipio de Texistepec, Saúl Reyes Rodríguez, fue asesinado cuando asistía a un funeral… y así va creciendo un ambiente de terror impuesto nuevamente por el morenismo en el poder.
Creemos que es tiempo de que la sociedad comience a actuar, a exigir respuestas positivas de la autoridad no complicidad con los malandros o, al revés, la manipulación de los delincuentes para intimidar con fines electorales.
REFLEXIÓN
Que pena, nos quieren tener distraídos con babosadas como la foto de ayer, intentando arraigar a la zacatecana en Veracruz, habiendo tantos y tantos problemas que atender. ¡Claro que son distintos, no tienen materia gris! Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx | formatosiete@gmail.com |