Así como en la Alemania Nazi, Adolfo Hitler logró ejecutar su famosa “Blitzkrieg” -guerra relámpago- contra las naciones aledañas, para con ello, hacerse del control de toda la Europa de la mitad del Siglo XX, así en México, Andrés Manuel López Obrador cuenta con su “Fuerza Panzer” –aquellos tanques de origen Checoslovaco, que, por sus características, permitían tener una penetración rápida e inmediata en el territorio a conquistar- para atacar ante cualquier intento de cambio.
Y es que nadie podrá negar que Morena ha empleado una estrategia muy distinta a la que los partidos convencionales aplicaban para hacer sus campañas, estos, prestos, con un ejército de Servidores de la Nación o en los denominados Tequios, caminan la milla para tocar casa por casa y llevar el mensaje del líder fundador.
Aunque el objetivo de esta “guerra relámpago” es la de culminar con una clara victoria, evitando por lo tanto la posibilidad de una guerra total y el desgaste que supone en términos de vidas y de recursos. Se trata de una táctica de ataque que consiste de un bombardeo inicial, seguido del uso de fuerzas móviles, atacando con velocidad y sorpresa para impedir que el enemigo pueda llevar a cabo una defensa coherente.
Así es como actúa la “Fuerza Panzer” de Morena, llevando un bombardeo ideológico con los principios fundamentales del movimiento, en donde repiten hasta el cansancio, que ellos no mienten, no roban y no traicionan al pueblo de México, en donde hablan de barrer la corrupción y acabar con ella de un plumazo, donde explican que el presidente cuál iluminado es el cambio y redentor.
Su actuar podría compararse dicen los expertos con el comportamiento de una secta religiosa, de esas que cada domingo, llega y le toca la puerta para entregarle una revista “Despertar” o una “Atalaya”, generando inclusive que aquellos que comulgaran por años con cierta fuerza política, terminarán sucumbiendo ante el oído encantador de Morena.
Pero lo que no hay que dejar de lado es que esa “Fuerza Panzer” tiene sus grandes mariscales, sus grandes generales, en Veracruz, los más visibles son Esteban Ramírez Zepeta, líder estatal de Morena, quien se la pasa recorriendo la entidad intentando hasta el cansancio convencer a la población.
Otro que también actúa a ras de suelo, y opera como un experto zapador, que ha ido abriendo brechas, trincheras en todos los frentes a donde lo han enviado es el mismo presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso Local, Juan Javier Gómez Cazarín.
Su apoyo ha quedado demostrado en todos los procesos electorales recientes, no solo en Veracruz, sino a las entidades vecinas a donde le mandaron a operar.
Esa “Fuerza Panzer” no la tiene ningún otro partido político, y es real, es el arma más poderosa que Morena tiene en sus manos para hacerse del control político de las regiones, sin que nada, ni nadie, les haya hecho mella o detenido, por eso aun cuando el crecimiento de la posible candidata de la oposición Xóchitl Gálvez se ve alentador, la pregunta aquí será ¿para qué le alcanza?
Sextante
Queda una vez más en evidencia que el actuar de Movimiento Ciudadano (MC) como fuerza política en México es única y exclusivamente hacerle el caldo gordo a Morena.
La prueba de su actuar quedó evidenciada en el pasado proceso electoral del Estado de México, donde al no participar inclinaron la balanza a favor de Morena.
Ahora que algunos integrantes de su partido dicen vamos con Xóchitl Gálvez Ruiz, como lo refirió el propio coordinador parlamentario en el Senado, Clemente Castañeda, sale de inmediato su líder y fundador Dante Alfonso Delgado Rannauro a decir algo así “Lo que está fuera de toda discusión es que con el PRI ni a la esquina. Y con el TITANIC de la Alianza tampoco”.
¿Para quién trabaja MC? Porque para el pueblo de México no, eso queda claro.
Al tiempo.
astrolabiopoliticomx@gmail.com
Twitter: @LuisBaqueiro_mx |