Ballesteros Grayeb es un hombre muy trabajador, un exitoso empresario y un xalapeño muy querido en la Atenas Veracruzana, que además le ha dado trabajo a mucha gente, ha sido un buen patrón y su imagen es bastante positiva, Toño incluso se conserva guapetón, aun siendo abuelo.
Del lado opositor levantó la mano Sergio Hernández, aquel panista que se trenzó de las mechas con la muchacha Lobato Calderón por el presupuesto de la JUCOPO en la LXIV Legislatura, el joven panista, cuyo único mérito ha sido bailar bonito, envió una invitación para su registro el próximo viernes y yo me pregunto ¿Que ya se acabó el recurso aquel, por el que por poco y se mata con Cinthya Lobato y por ello es que insiste en lanzarse a una campaña, que de plano la lleva perdida?
Y es que el pupilo de Martín Espinosa y Pepe Mancha, lo que debería hacer es registrarse, pero a la Universidad Cristóbal Colón, para finalmente titularse de la licenciatura, porque aunque no sea un requisito para ser diputado, sí sería bueno, que al menos tuviera algo interesante que ofrecerle al electorado y es que a falta de propuesta legislativa, el hombre podría ponerse a recitar los textos de Eugene Petit, aparte de bailar como monito cilindrero, así al menos le daría variedad a la comparsa… ¡Vaya! Si es que llega a algún lado.
También por el mismo partido y por el mismo distrito, suspira Carlos “Chico” Fuetes, un muchacho muy simpático, xalapeño de toda la vida, pero que va de comparsa de Sergio Hernández nada más.
Cosas de la vida y menudencias
¡Ay no bueno! Con el joven Esteban Ramírez Zepeta, que no solo dicen que vende candidaturas, también vende citas con la candidata Nahle y hasta que usa ropitas Carolina Herrera, yo me pregunto y si el señor quiere ponerse una chamarra fina ¿Qué?
También a la diputada Adriana Esther Martínez y sus tenis Dolce & Gabana, que resultaron ser clones, pero ¿Y si fueran originales? Y la diputada se hubiera gastado lo que sea que cuesten los tenis en un gustito ¿Qué?
¡Vaya! Que sí ¡Mi gente! Comprar bueno y fino, cuesta y más zapatos, pero es que no hay nada peor que usar zapatos de mala calidad, se te destrozan los pies, te salen ampollas y andas por el mundo padeciendo la indignidad, ahora que ni modo que siendo gobierno, anden en huarache de suela de llanta, si ya de la oscurana, salieron hace mucho, ya le dieron a la labor como para zapatitos nuevos ¿Qué no?
La realidad es que los políticos y funcionarios, deberían de dejar por fin aquel discurso de la pobreza y tal ¡Hoy en día! Ni los frailes, quieren padecer miserias, a todos nos gusta comer bien, vestir bien y vivir bien… Para eso trabaja uno.
Mal los políticos que repiten que la austeridad y mueren de hambre de fino y bueno, pero peor nosotros que les seguimos el cuento… A nadie le gusta vivir jodido.
En fin, nos leemos mañana.
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