Bajo estas condiciones es como se ve el futuro de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien por momentos parece que se deshace de la sobra del caudillo, mientras que, en otras ocasiones, avala los caprichos presidenciales por considerarlos viales, cuando en realidad, la gente pensante de este país, cree que será un caos si persiste en continuar con el modelo reformista del presidente López Obrador.
Son tiempos, pues, de una sesuda reflexión sobre el camino político y administrativo que deba seguir el nuevo gobierno, porque una de las principales necesidades de los mexicanos, son los empleos que le dan de comer a muchas familias.
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EL RETO DE NAHLE
EL PRIMER PASO que tiene que dar la virtual gobernadora del Estado de Veracruz, será convencer a la mayoría de veracruzanos que no ser veracruzana, no es impedimento para llevar a cabo una buena administración, es decir, que de verdad tiene amor por Veracruz, como lo prometió durante su campaña política.
Hay mucha inconformidad sobre los resultados electorales y eso es un serio obstáculo para que Rocío Nahle, puede encajar perfectamente con los veracruzanos, que se quedaron insatisfechos con lo sucedido en las elecciones del dos de este mes que está por terminar.
Tendrá que haber un meticuloso manejo de las finanzas públicas, donde reside la mayor desconfianza hacia la nueva titular del poder ejecutivo de Veracruz, porque, al parecer, no hay suficiente confianza de que los recursos puedan ser aplicados convenientemente y de acuerdo para lo que son etiquetados.
En ese sentido, lo que se creía, antes de anunciar el nombramiento de Ricardo Ahued, como secretario de gobierno, que fuera precisamente el todavía alcalde de Xalapa, quien se hiciera cargo de la secretaría de finanzas y planeación, principalmente, porque la gente le tiene confianza en este asunto de los dineros públicos.
Sin embargo, las cosas están tomando otra dirección donde también hace falta orden para regular la relación permanente del gobierno con el pueblo en general.
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LA CALMA CHICHA
HAY RELATIVA CALMA chicha, como se dice popularmente cuando se tiene un ambiente de tranquilidad, como si anunciara nubarrones en la vida política de un Estado o bien del propio país.
Suele aplicarse esta observación cuando hay un periodo de transición gubernamental y en Veracruz, por el momento, todo parece estar en estas condiciones, aunque se dice también que pudieran darse acontecimientos de inconformidad, sobre todo, llegado el momento de iniciarse el trabajo político y administrativo del nuevo gobierno
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede. |
