Pero a pesar de que su chamba lo avala, no todo fue miel sobre hojuelas en un principio.
Desdeñado por los bancos que no querían tener tratos con el representante financiero de una entidad que tenía un adeudo descomunal. Y mal visto por los expertos en finanzas que lo consideraban “muy verde” para el cargo, José Luis Lima Franco se puso a trabajar en un esquema de tres vertientes que le permitieron reducir la deuda de Veracruz: austeridad, contención del gasto y disciplina financiera.
Y así empezó a escribir su propia historia.
Esta administración que se encontró con un adeudo de 87 mil 207 millones de pesos, la redujo a 66 mil millones. Es decir, se irá después de haber reducido la deuda en 20 mil millones de pesos. Pero además y por primera vez desde el sexenio de Patricio Chirinos, dejará a la siguiente administración un “colchón” financiero de 10 mil millones de pesos en las arcas estatales. Algo que no hicieron Miguel Alemán, Fidel Herrera, Javier Duarte y Miguel Ángel Yunes Linares.
En menos de seis años, el gobierno de Cuitláhuac García logró reducir la deuda, deja dinero en las arcas, da certidumbre a los inversionistas y (después de que los bancos no querían saber nada de Veracruz) es buen sujeto de crédito en las instituciones bancarias.
Y nadie puede negar que el arquitecto de todo eso es José Luis Lima Franco.
A Lima Franco lo acompañará en la Subsecretaría de Egresos, Pedro Miguel Rosaldo García, nativo de Coatzacoalcos y que estuvo con Rocío Nahle en la Secretaría de Energía.
La gobernadora electa dijo que ambos funcionarios van a ayudar al crecimiento de Veracruz, a que haya mayor ingreso, a vigilar el gasto con responsabilidad y sobre todo, a cuidar las finanzas.
Rocío fue enfática al hablar en más de una ocasión sobre el crecimiento de Veracruz que ojalá se haga realidad.
Por lo pronto, ya dio el primer paso al ratificar en su cargo a quien hizo el milagro de poner a flote la barca de las finanzas que encontró casi hundida.
bernardogup@hotmail.com |