Así que ese requisito también lo cumple, ya que su título legítimo, lo obtuvo y ese proceso es mucho más honesto y legal, que apersonarse en la plaza de Santo Domingo en Ciudad de México y con mil pesitos, haberse hecho con un título maravilloso de la Universidad Nacional Autónoma de México o similar apócrifo.
Considero laudable que don Ricardo obtuviera su título de ese modo, experiencia tiene y mas en mitad de la militancia del Movimiento de Regeneración Nacional; como quiera en política el señor Ahued, ha sido de todo menos gobernador, sin embargo y con la pena, pero para ser útil y funcional en la Secretaría de Gobierno, va a tener que actualizarse y mucho.
El señor Ahued es de otra época culturalmente hablando, si bien la caballerosidad siempre se agradece, la equidad hoy es una realidad y los señores como él, no siempre lo entienden del todo; por otro lado están también los grupos de mujeres, las alertas de género y tantas otras situaciones con las que va a tener que lidiar desde la Secretaría de Gobierno, que siendo el tan delicado y tan moro capaz y se le complica.
En fin, que se le desea lo mejor peroooo entre el señor Pozos Castro y el señor Ahued, van a necesitar un airecito juvenil que los ponga al tiro en cuanto a equidad, inteligencia artificial, mundo contemporáneo, redes sociales y tantas otras cosas que han pasado en estos vertiginosos últimos 10 años.
Cosas de la vida y menudencias
Cuentan que Enrique Pérez, aquel eterno corifeo de Miguel Ángel Yunes Linares y que en el periodo del ex gobernador choleño, fuera titular de la Secretaría de Educación, está ya instalado en la Ciudad de México a la espera de tremendo hueso federal moreno ¿Será?
Pues así las cosas mis hermosos, sigue el gobernador Cuitláhuac García a tambor batiente en la búsqueda de un cierre gubernamental digno… nos leemos mañana.
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