Incertidumbre, dolor y temor, aunque no sorpresa, debido al enorme número de conflictos bélicos regionales entre varios países en el mundo, causaron las palabras del presidente de Rusia, Vladimir Putin, en las que por primera vez en la era moderna un personaje de ese nivel habló y reconoció que “le preocupa” el riesgo de una “Tercera Guerra Mundial”. 

Es decir, ya no se trata solo de rumores políticos, se trata del reconocimiento de impotencia y de que Putin siente que el problema bélico entre países se les está saliendo de control a los principales líderes protagonistas, entre ellos él mismo y Donald Trump de los Estados Unidos.  

Y es que si al mundo le han preocupado las guerras entre Rusia y Ucrania, y otras más, la más peligrosa es sin duda la que sucede en el Medio Oriente entre Israel e Irán, en la que los Estados Unidos intervienen directamente y de la cual Putin se deslinda de estar interviniendo. 

“Putin teme que estalle una Tercera Guerra Mundial”, son el estilo de los encabezados de la prensa mundial. 

Entrevistado en el Foro Económico Mundial de San Petesburgo, Vladimir Putin sostuvo que los actuales conflictos bélicos internacionales, especialmente con Ucrania y en el Medio Oriente, podrían escalar a niveles catastróficos. “Me preocupa, lo digo sin ironía, existe un gran potencial de conflicto que está creciendo. El mundo se encuentra frente a una peligrosa acumulación de tensiones”.

Esas declaraciones de Putin si bien para algunos son unas sinceras preocupaciones, para otros son veladas amenazas a USA. 

Sin embargo, lo que en realidad debe importar es lo que declare al respecto el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, pues gran parte de los conflictos mundiales han sido alentados desde la Casa Blanca y han calentado el ambiente económico, financiero y comercial principalmente contra el gigante Chino y otros países asiáticos que de tomar parte en un eventual conflicto mundial, no se ve que marchen al lado de USA. 

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