Es desolador el panorama electoral en Veracruz, el grueso de los ciudadanos de las principales ciudades del estado, tienen la percepción de que son corruptos (81.7%). En más ninguna institución o sector se salva: policías (77.7%), Gobierno del Estado (77.0%), Gobierno Federal (75.6%), gobiernos municipales (73.5%) y diputados y senadores (70.6%), por citar los más importantes están en misma tesitura. El hartazgo social de los ciudadanos sobre la clase política veracruzana es manifiesto, el voto de castigo estuvo presente.
En consecuencia, con esta pésima calidad gubernamental del Gobierno del Estado, de acuerdo con la opinión de la ciudadanos recabada por la ENCIG 2015, además de la quiebra financiera, cero crecimiento económico y del empleo formal, inseguridad, observaciones de la ASF y demás, no es posible justificar bajo ningún argumento, la pretensión de basificar a mandos superiores, como lo son los directores de área, subdirectores y hasta asesores. Es más, de todos es sabido que muchos son cómplices de los secretarios y subsecretarios de las dependencias que manejan recursos públicos. Hay un cáncer terminal que hay que extirpar.
Repito, la ENCIG 2015 (INEGI), proporciona información referente a la opinión de la población de 18 años en adelante, que reside en ciudades de 100 mil habitantes y más, sobre la prevalencia de la corrupción en las diferentes instituciones y sectores. Para el caso del estado son las siguientes ciudades: Boca del Río, Coatzacoalcos, Córdoba, Minatitlán, Orizaba, Poza Rica, Veracruz y Xalapa. |