El palo de la Suprema Corte, ayer
El palo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ayer fue no sólo para el gobernador Duarte, sino también para los diputados locales del PRI y sus aliados, así como para sus respectivas áreas jurídicas.
Al invalidar la ley anticorrupción que había promovido el gobernador, en el fondo llevaba la advertencia del presidente Peña Nieto de que no permitirá a ningún gobernador que trate de ampararse en su poder local para ganar impunidad.
Porque es cosa de recordar que tan pronto presentó la PGR la acción de inconstitucionalidad ante la Corte, Duarte retiró su iniciativa y dio marcha atrás, no obstante el Presidente no desistió en su demanda.
A él y al otro Duarte, Peña los tomó y los puso como ejemplo de lo que no debe ser. Sin duda, un revés legal pero también político que incluso podría ser un anticipo de que sí se va a actuar en su contra. Al menos fue ya una advertencia.
Los deja solos
Entre el interés político e institucional y el de sus representados, el gobernador Javier Duarte de Ochoa optó ayer por el primero.
Ante el reclamo del alcalde de Coatzacoalcos Joaquín Caballero Rosiñol al Secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong por su falta de apoyo para reforzar la seguridad en el municipio con fuerzas federales, en lugar de apoyar al primero, que representa a todo su pueblo, trató de justificar al segundo, en una decisión, a mi juicio, totalmente equivocada.
Actuando responsablemente y seguramente por la presión social que tiene encima, el presidente municipal mediante una carta publicada ayer en El Universal reprochó a Osorio la respuesta negativa que le dio a una solicitud que le hizo para que la Policía Federal reforzara la seguridad en el municipio y enviara unidades de investigación especializadas en atención al secuestro.
El alcalde porteño le solicitó además una audiencia con carácter de urgente para testimoniarle junto con representativos del municipio la “grave situación de inseguridad… de inquietud y zozobra que enfrentan las familias de Coatzacoalcos”, el “clima de intranquilidad” que “ha motivado reiteradas expresiones de hartazgo entre la sociedad”.
En su carta, Caballero Rosiñol le dijo muy claramente que “los esfuerzos que se han hecho por parte de los tres órdenes de Gobierno no han sido suficientes”, con lo que hizo una crítica tanto al Gobierno Federal como al estatal por la falta de resultados, aunque se incluyó seguramente para suavizar el reclamo público.
Aunado a lo anterior, el presidente municipal se quejó también ayer en declaraciones a la prensa que pese al aumento de homicidios dolosos y secuestros en Coatzacoalcos, el municipio no fue incluido en la lista de los 50 municipios que anunció el presidente Peña Nieto para desarrollar una estrategia de atención integral de combate a la violencia en el país.
Ante el reclamo, petición y denuncia de la autoridad municipal a favor de sus representados, el gobernador en lugar de apoyarlo, máxime que representa el municipio de donde es oriunda su esposa Karime Macías Tubilla, respondió con dos tuits tratando de justificar al Gobierno Federal: “Agradezco al Presidente @EPN y al Secretario @osoriochong por todo su APOYO y SOLIDARIDAD, subrayando que la responsabilidad es nuestra” y “En materia de seguridad y procuración de justicia estamos poniendo la mayor atención en #Coatza y la región sur del Estado”.
Ayer, una fuente del Gobierno del Estado me dijo que había sorprendido a la Casa Veracruz, o sea a Duarte, que Joaquín se hubiera ido por la libre, es decir, que no le consultara sobre lo que iba a hacer, lo que para nada le gustó, y por eso su reacción.
Lo que ocurrió sería una evidencia muy clara de que el alcalde por fin decidió liberarse de las ataduras políticas con las que actuaba o por las que no actuaba, o que simple y sencillamente decidió tomar distancia del gobernador que ya se va (en “Prosa aprisa” publiqué que el pasado 22 de junio un achichincle del gobernador le prohibió que hablara con el Gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares cuando éste se le acercó para hablar con él, durante el acto de inauguración del complejo petroquímico Etileno XXI).
Con su reacción de ayer, el gobernador desaprovechó la oportunidad que le dio Caballero Rosiñol para atenuar las críticas y los reclamos que seguramente le harán los habitantes de Coatzacoalcos y de todo el sur del estado el próximo sábado durante la “Marcha por la paz” convocada por la Cámara Nacional de Comercio y otras organizaciones de la sociedad civil y a cuyo llamado para tomar la calle se ha sumado en forma decidida la Iglesia católica a través del obispo de la Diócesis, Rutilo Muñoz Zamora.
Lamentable que el gobernador no vea el infierno que viven todos los habitantes del sur de la entidad a causa de la inseguridad y por la ineficacia de las policías. Anoche, de acuerdo a una fuente confiable, la policía investigaba el secuestro de cinco personas ahí en Coatzacoalcos, aparentemente por fortuna todavía vivas. Cuánta pesadumbre debieron sentir ayer mis paisanos al saberse solos, abandonados por quien en su campaña ofreció que velaría por su seguridad y sus intereses. A través de este espacio les expreso toda mi solidaridad y apoyo y les digo que no están solos.
También respondió a Miguel Ángel
Con otro tuitazo respondió también el gobernador a las declaraciones del domingo del Gobernador electo Yunes Linares por la inseguridad que se vive en el estado.
Yunes pidió también la intervención en el estado del Gobierno Federal tanto para que ayude a fortalecer las finanzas públicas estatales como para que envíe fuerzas que se hagan cargo de la seguridad pública ante la ola de violencia que nos azota.
Una fuente del Gobierno del Estado me dijo ayer que el contenido del tuit “Javier Duarte @Javier_Duarte En 6 años jamás he rehuido a mi responsabilidad y siempre he dado la cara, los veracruzanos eligen a un Gobernador no a un Gerente”, equivalía a decirle al Gobernador electo que él, Duarte, no ha estado pidiendo apoyo al Presidente para que le resuelva los problemas y quedar convertido en sólo un administrador, sino que ha enfrentado los problemas como ha podido.
Peña, obligado a intervenir: Yunes
"No puede el gobierno federal dejar de ver lo que sucede que es una emergencia en materia de seguridad, empleo y seguridad pública", respondió ayer por la tarde Miguel Ángel al llegar al Informe de Actividades de la rectora Sara Ladrón de Guevara y ser abordado por los reporteros.
Ante pregunta de mis compañeros, respondió que el gobierno federal está obligado política y moralmente a intervenir pues tanto Duarte como Peña Nieto son del mismo partido pero “el presidente lo ha cobijado. Por lo tanto tiene que responderle a los veracruzanos de las cosas que Duarte hizo". |
