Y es que tras el enroque Videgaray-Meade pocas dudas de por donde habrá de transitar el proceso de la sucesión presidencial tras los repetidos yerros de Enrique Peña Nieto.
En lo de Meade jugó sin duda la circunstancia, pero también el fracaso en las reformas estructurales y las mismas torpezas de Luis Videgaray que provocaron la caída en vertical del presidente Peña tras la inopinada visita del racista, enemigo de los mexicanos, Donald Thrump.
Hoy a la vuelta de los cambios en el gabinete vale la pena evocar, sin caer en infidencias ya que los tiempos y las circunstancias cambiaron, aquel 26 de noviembre del año pasado cuando José Antonio Meade dijo a este reportero delante de Pepe Yunes que “el proyecto sexenal, no bianual, es Pepe (Yunes)”.
En aquel momento confió que gracias a la opinión de Pepe Yunes ante el PRI de Beltrones, la federación y el gobierno de Javier Duarte, sería Héctor Yunes Landa el candidato del PRI al gobierno del estado.
De todo ello estuvo al tanto el presidente Enrique Peña Nieto quien dio el aval a la decisión de sus equiperos.
Y acaso las cosas no se dieron con tal puntualidad dado el ir y venir de Duarte, pero ese fue el mandato central del cual respalda al ciento por ciento el entonces secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade Kuribreña, hoy titular de la hacienda pública federal.
En aquella oportunidad Meade dijo además algo muy valioso: “En el 2016 Pepe va a bajar recursos federales como nunca antes un senador de la república lo ha hecho y trabajará con hechos, no con promesas”.
Así sería.
Por la vía de la Secretaría de Desarrollo Social, el legislador peroteño ha llevado a las más apartadas comunidades veracruzanas más de 3 mil 500 millones de pesos.
El alto funcionario federal, José Antonio Meade, recibió a este enviado a invitación de Pepe Yunes en sus oficinas de Paseo de la Reforma para dejarle muy en claro que hacia el 2018 se trabajaría de la mano y con el liderazgo de Luis Videgaray en el proyecto del 2018 “en donde está inserto Pepe Yunes”.
Meses después cuando empieza a declinar el sol que alumbraba a Videgaray las baterías se empezaron a enfocar hacia Meade llevando como acompañantes al mismo grupo del posgrado y una parte del integrado en el Edomex: Aurelio Nuño, Virgilio Andrade, ya fuera del servicio público, Fernando Aportela, Alfonso Navarrete, Enrique De la Madrid, José Antonio González Enrique Ochoa Reza, Francisco Guzmán y Alejandra Lagunes.
“2016 será crucial”, comentó en aquel momento Meade a este reportero tras señalar que “en lo de Pepe no hay equívocos, confusión o dudas: él será el candidato del PRI en el 2018”.
Así, al darse a conocer este miércoles el nuevo ajuste presidencial se confirma hacia dónde se está moviendo el aparato presidencial rumbo a la sucesión considerando, desde luego, imponderables como la derrota no prevista en Veracruz el pasado 5 de junio lo cual complica el siguiente juego electoral.
Pepe Yunes, sin embargo, se ha manifestado optimista de seguir trabajando y “cumpliéndole a los veracruzanos” desde el Senado, así como aguardando los tiempos ya que lo primero es lo primero.
Habrá de transitarse, una vez que concluya el sexenio de Duarte, por la renovación de la dirigencia priista, la emisión de la convocatoria para la renovación municipal -212 municipios van a elecciones en junio del 2017-, luego el proceso para la gubernamental del 2018, a la par de los diputados locales, el congreso nacional y la presidencia de la república.
¿Qué si será un suspiro el mandato de Miguel Angel Yunes Linares?
¡Lo será!
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo |