El programa de Comunidades Seguras, que impulsa la Fundación Karolinska (la misma que apoya la entrega de los Premios Nobel de Medicina), ha mostrado una eficacia ostensible, al grado de que cinco municipios que consiguieron este reconocimiento, están entre las 50 ciudades con menor tasa de homicidios en el país.
- Tula de Allende, con cero homicidios, es el primer lugar nacional en seguridad.
- Mérida, con una tasa de 2.97 homicidios por cada 100,000 habitantes. Está en el 15o lugar.
- Cuajimalpa, con 3.12 homicidios por cada 100,000 habitantes, ocupa el sitio 16.
- Puebla, con 5.10 homicidios por cada 100,000 habitantes, está en el sitio 34.
- Tuxtla Gutiérrez, 6.04 homicidios por cada 100,000 habitantes, lugar 47.
El programa de Comunidades Seguras lo impulsa la Asociación Nacional de Consejos de Participación Cívica, que preside Arturo Mattiello Canales, oriundo de Veracruz, y quien le ofreció el programa al gobierno del estado en múltiples ocasiones, mediante varios funcionarios, pero al que nunca le hicieron caso.
Paradójicamente, en Chiapas, donde el gobernador Manuel Velasco Coello es aliado del fidelato, si tomaron el programa y ese estado es hoy el primer lugar nacional en seguridad.
Manuel Velasco es tan cercano al fidelato que incluso vino a Veracruz durante las elecciones federales del 2015 para acompañar a Alberto Silva (que estaba en su campaña a diputado federal) junto con Javier Herrera, quien fue electo diputado federal plurinominal al ser albergado por el estado de Chiapas para que fuera postulado en la lista del PVEM, para que nadie lo objetara.
La lista de las 50 ciudades con mayores índices de homicidios y con menores índices , la elaboró Animal Político, a partir del trabajo estadístico de la organización Data4, sustentado en cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública y el Consejo Nacional de Población (Conapo).
Paradójicamente hay municipios del estado de Veracruz que se encuentran entre los que tienen menores índices de homicidios, como San Andrés Tuxtla, para el cual se registra una tasa de 5.40 por cada 100,000 habitantes, mientras que a Cosoleacaque se le anotan 5.80, en el mismo parámetro.
El dato no es creíble, por el alto número de homicidios que se conocen en el estado.
De hecho el informe de resultados del Índice de Paz México 2016, elaborado por el Instituto para la Economía y la Paz (IEP), reporta que la calidad de los datos relacionados con la violencia en México es deficiente no solo por la cifra negra de los casos que no se denuncian, sino por la falta de veracidad de los registros oficiales.
El mismo estudio colocó a Hidalgo, Veracruz y Tlaxcala entre las cinco entidades más pacíficas del país, sin embargo, este también advierte que los indicadores de dichos estados son dudosos, porque las tres entidades son de las que tienen el mayor subregistro de casos.
La administración de Javier Duarte es líder en opacidad de los crímenes. Oficialmente, la entidad reportó ante el Sistema Nacional de Seguridad Pública 569 personas asesinadas en 2014; sin embargo, los datos del INEGI dadas a conocer a mediados del 2015 arrojaron 890 personas asesinadas en Veracruz en 2014.
Esto significa que más del 36% de los homicidios, o sea la tercera parte, no fueron reportados por el gobierno de Veracruz.
Por eso es la duda de que San Andrés Tuxtla y Cosoleacaque puedan estar entre los municipios con menor índice de homicidios del país.
El listado elaborado por Animal Político, de los 50 municipios con más índices de homicidios incluye 6 del estado de Veracruz… pero deberían ser más y en un lugar más alto del ranking, si el subregistro no fuera tan elevado.
Aún así, la entidad es la que más ciudades tiene en ese rango, junto con Guerrero.
¿Cuáles son esos municipios?
(En todos el índice es contra 100,000 habitantes)
- Papantla, con 31.88
- Poza Rica, con 30.10
- Córdoba, con 28.94
- Pánuco, con 26.85
- Minatitlán, con 21.81
Pero Javier Duarte insise en que en Veracruz todo está bien, que no pasa nada.
Pero los terrenales, y muchos místicos, percibimos que en Veracruz nada está bien y que todavía es mucho tiempo el que le queda a la administración de Javier Duarte.
LA CEAPP, ¿DESAPARECER O REESTRUCTURAR?. La llamada Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas (CEAPP), carece de la aceptación de los periodistas del estado de Veracruz, al grado de que muchos son los que pedimos que la misma desaparezca, por inoperante y deficiente.
La CEAPP en sus actuales condiciones, sirvió sólo para cobijar a periodistas, académicos, dueños de medios de información, y abogados afines al fidelato, y por lo mismo, por el apego hacia la actual administración gubernamental, nada se hizo en la real y verdadera atención y protección a los periodistas.
De hecho la CEAPP ni siquiera ha servido para verificar que los programas gubernamentales implementados con éste fin se cumplan.
Las funciones de vigilancia, de acompañamiento, de protección, de certificación y demás que debía realizar, no se han ejecutado.
La CEAPP en sus actuales condiciones debe desaparecer y, en el mejor de los casos, dejar el espacio para que se estructure una instancia de apoyo y protección a los periodistas, pero que no sea de cobijo para los allegados del nuevo gobierno del estado.
Miguel Ángel Yunes Linares tiene la palabra en la propuesta a realizar, la cual deberá ser validada por un Congreso plural y activo.
La CEAPP debe desaparecer.
El esquema debe cambiar. |