Varias son las lecturas que arrojan los resultados de las elecciones de este domingo, en lo que respecta a sus resultados, entre ellos la caída del único bastión que le quedaba al Partido Revolucionario Institucional, en Veracruz como es el municipio de San Andrés Tuxtla, en donde por primera vez en su historia y de cara a la sucesión estatal será gobernado por alguien ajeno al PRI.

Como la habían anunciado algunas encuestadoras, gano las elecciones el candidato independiente Octavio Pérez Garay, con una ventaja superior a sus demás contrincantes.

 El Revolucionario Institucional, cayó en el marco de una elección totalmente agitada, en la que el Tricolor fue el gran perdedor, si tomamos en cuenta que era uno de los más favoritos en San Andrés Tuxtla, sin embargo gracias a las traiciones y deslealtades de la familia priista y al mal gobierno que realizo ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, obtuvo la victoria Octavio Pérez Garay, quien en su primera intervención señalo a los medios que buscara la unidad y la trasformación de su patria chica a través de obras prioritarias que demanden la ciudadanía.

En otro sentido diremos que el eventual triunfo de la alianza PAN-PRD, en varios municipios de los Tuxtlas y Llanos, fue un descalabro para el PRI y otros institutos políticos, que no pudieron con los aliados del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quienes ayudaron a que el “Yunismo”  presentara su cuota de poder político para buscar la candidatura a la gubernatura del año próximo, basado en que los “Aliancistas” ganaron  varios municipios, incluyendo Catemaco, con Julio Ortega Serrano, Santiago Tuxtla…Argenis Copete Vázquez, Ángel R. Cabada…Arturo Hervís Reyes y Lerdo de Tejada con Hermas Cortes y otros más, lo cual hizo que Miguel Ángel, se fuera a los cuernos de la luna en cuanto a sus aspiraciones políticas futuras. Y nos Vemos en la otra.

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