Pero él empezó a hacer un comparativo entre el gobierno anterior y éste, así como la mordida que tuvo que soltar para que le dieran el vehículo. Es decir, pensó que con el cambio de gobierno, se iría la corrupción; sin embargo, muchos de los funcionarios siguen despachando corrupción a discreción desde sus escritorios.
Mucho hemos hablado de la corrupción. Todos los días escuchamos de ella, incluso la percepción de la corrupción en México sigue aumentando. Así lo comprueba el estudio Social Progress Index 2017 dado a conocer este miércoles en donde nuestro país ocupa el lugar 93 de 128. Cabe hacer mención que el año anterior México tenía la posición 78. Es decir cayó 15 lugares.
¿Y Veracruz?
Nuestro estado no está libre de corrupción. Seguramente usted conoce algún caso en el que hasta para agilizar un trámite le piden una “mordida”.
El 19 de julio entrará en vigor el Sistema Nacional Anticorrupción en todo el país; sin embargo, a los Congresos locales parece no interesarles.
Incluso, ayer el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares hizo un llamado a los diputados para aprobar las reformas y establecer el Sistema Estatal Anticorrupción y la ley así como su reglamento, ya que todo parece los legisladores van “bastante lentos”.
Y es que si vemos el semáforo anticorrupción implementado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) que monitorea la implementación de los Sistemas Locales en los Estados, sólo Nayarit y Chiapas cuentan con una Ley Satisfactoria para iniciar el próximo 19 el combate a la corrupción.
Según el mismo semáforo, Veracruz cuenta con una reforma constitucional satisfactoria en materia de combate anticorrupción, aunque le falte implementar los órganos y los procesos correspondientes para concluir tal Sistema.
Desde principios de marzo, se dijo que la Ley Estatal contra el Combate se estaba analizando en comisiones, ya que la Reforma Constitucional era deficiente; poco a poco se ha ido adaptando, pero aún falta mucho por hacer e implementar.
Muchas expectativas se crearon con los diputados que integraron el nuevo Congreso; sin embargo, la corrupción se ha estancado y sigue haciendo de las suyas. Mientras, los diputados se hacen bolas entre el caso de Eva Cadena y la ausencia de transparencia.
¿Tendrán lista la Ley del Sistema Local Anticorrupción o seguirán debatiendo asuntos de “mayor trivialidad”?
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