Finalmente creo que esa buena disposición que muestran –queriendo ser desconfiados- obedece también al riesgo de pérdidas económicas que sufrirán en caso de que los usuarios “se pongan serios”, -y ante la ausencia de verdaderas leyes que garanticen la efectiva protección a los usuarios y la máxima responsabilidad de las empresas para blindar sus operaciones electrónicas (como en el caso sucede) sumadas a la falta de herramientas auxiliares idóneas y especializadas de la justicia, incluso a la voluntad de las autoridades para integrar una exhaustiva investigación y ubicar y hacer pagar a los defraudadores- decidan simplemente dejar de pagar, aunque las Sociedades de Información Crediticia como Buró de Crédito y/o Círculo de Crédito tomen nota de tal incumplimiento.
Así las cosas me parece importante renovar esa invitación tan frecuente que siempre hago –y practico- para que Usted ponga interés y se tome un tiempo para revisar y leer los contratos de todos los servicios que contrata, máxime de aquellos que son de orden financiero. Si fuera el caso de que carece de contrato, porque no se lo dieron al contratar o porque no le dio importancia y lo tiró a la basura, o lo usó para anotar algo y lo extravió, está a tiempo solicítelo es su derecho y en determinado momento será su protección.
De igual manera aprovecho la ocasión para recordarle que estamos a punto de cruzar la Segunda Cuesta del año: la de la entrada a clases. Que no es menos grave que la de Enero, pero sí menos popular y por tanto, para la que menos estamos preparados. De ahí que aprovecho este Aviso de Seguridad para advertirle que los fraudes financieros son más que phising, vishing, pharming, y otros males identificados por anglicismos.
Los Créditos Exprés son una diversa modalidad de fraude, y en estas fechas de entrada a clases se vuelven muy recurrentes pues ante la necesidad de obtener dinero rápido, muchos prestan atención a empresas fantasmas que les ofrecen grandes cantidades de dinero prestado a bajísimos intereses, sin requisitos, sin consultar a las Sociedades de Información Crediticia (la más popular Buró de Crédito) ¡un verdadero sueño!, sin embargo lo que desconocen es que esas empresas o financieras son, fantasmas.
No existen, no están reguladas, aparentan ser oficinas bien “montadas” con personal muy atento que a todo te dice “sí” y luego “no se preocupe” y luego otra vez “sí”; hasta que te convencen de que ese préstamo es seguro, siempre y cuando… hagas un pago o depósito anticipado, en concepto de gastos por el trámite de apertura o de solicitud del crédito, y ahí está la estafa.
¡Ese pago inicial es una estafa!, pues finalmente te notifican que tu solicitud fue rechazada y que no fue autorizado, así mientras sales del asombro te darán cualquier excusa para de ser posible volver a obtener de ti, otra cantidad adicional para “reconsiderar” tu solicitud o en concepto de “fianza” para que te puedan dar tal crédito y como para esas alturas ya hiciste castillos en el aire pensando todo lo que resolverás con ese préstamo, haces un segundo esfuerzo, pides prestado a tus familiares, amigos, o algún usurero total –piensas- es temporal, en lo que te aprueban el crédito.
Sin embargo ese préstamo exprés, nunca llegará… el día menos pensado la empresa desaparece sin dejar ningún rastro de donde buscarla, habrás perdido tu dinero, y quedarás endeudado con quien o quienes te prestaron ‘lo del enganche’, así que mejor evita caer en estafas y no realices ningún pago por adelantado, si las condiciones que te ofrece alguna empresa son demasiado benévolas mejor consulta el Sistema de Registro de Prestadores de Servicios Financieros para en primer término asegurarte de que es una empresa seria, debidamente constituida y regulada; así tendrás a quien acudir en caso de que se presente algún problema durante el trámite.
De lo contrario las autoridades encargadas de revisar la actuación de las entidades financieras y sancionarlas en caso de abuso no podrán intervenir en tu favor, por falta de facultades.
Pero esto no es todo, después de cerciorarte de que la empresa existe legalmente, lee con calma, atención y detenimiento el contrato para que entiendas cuales son las condiciones del mismo y a lo que te obligas, y que pasa en caso de que tu solicitud sea rechazada; pues si aceptas y firmas de conformidad algo que pueda ser perjudicial a tus intereses, habrá “quien” pero no, “como” ayudarte.
Así que mucho cuidado y atención en estas fechas a todo lo que firmas y contratas.
¡Hasta la próxima!
Visite www.elbarzonrc.org Contacte elbarzonrc@yahoo.com.mx, O sígame en @terecarbajal Cel 2281148502 |