“Antes de buscar los bueyes…busca el arado”.
No se puede esperar más. Las opiniones y encuestas, decisiones y acuerdos están saliendo del horno de los diferentes partidos políticos del país. Claro que Andrés Manuel López Obrador, desde hace más de 20 años está en campaña a pesar de la desilusión de cada seis años, insiste y persiste, alega y maldice, actúa y repela. Es su estilo, la inconformidad en su lenguaje lento, dudoso y perdurable.
Ya la agarró con José Antonio Meade.
Se esperaba. Es su añeja guerra en la política del país. La toma en contra de todos los personajes políticos de México. Cierto es, líder y aguerrido presidenciable que con su partido, si, de su propiedad, encabeza las encuestas con Morena. No se duda ni se oculta. Es cabrón.
Pero a la hora de la verdad, sea como sea, “haiga sido como haiga sido”, del cantinflesco Calderón, pierde la elección.
Trampas o no, mañas o sí, pero sale con la derrota.
Dejando por un momento los acontecimientos políticos de México, en especial los aspirantes a la Presidencia, en Veracruz, no cantan mal las rancheras, un Pepe Yunes con la melodía “ya vine de donde andaba, se me concedió volver”, advirtiéndole a Héctor Yunes Landa, “porque estás que te vas y te vas…y no te has ido”, y el cantante senador choleño, respondiendo como en las viejas cintas de Pedro Infante y doña Prudencia, “si acaso te ofendí, perdón, si en algo te engañé, perdón”…y así se avientan nuevamente al ruedo, con la táctica aplicada del Peje, a don Héctor Yunes nadie le ha dicho que la campaña al gobierno de Veracruz, ya concluyó…ganó Miyuli.
Héctor el senador, sigue en campaña, se siguió de frente y declarando furiosamente todo lo que se vive en Veracruz. Quizás el cautiverio de la militancia priista lo tiene en las preferencias para repetir como candidato. Los que están sujetos a caprichos y voluntades mañosas, así como también vemos a priistas incansables que con lealtad y trabajo piden, gritan suplican, se designe al mejor y no con esa vieja manía de ajustarse a la fisonomía de un PRI en decadencia y en el desgaste diario…
Los priistas consistentes exigen, de plano, un candidato al gobierno de Veracruz, con agallas pero no valentonadas. Con carisma pero no falsos protagonismos. ¡¡ Es Pepe…!!, se dice…¡¡ Es Pepe Yunes…!!, se comenta insistentemente en estos días últimos de noviembre.
Ciertamente…pero ¿acaso Héctor Yunes estará dispuesto a ceder a lo que insiste desde hace diez años?. Vemos que en el “choleño”, paisano de Orlando y Román García Ortiz, aparece esa ansia de revancha, de lograr su objetivo y a pesar de que se dice que el pacto fue “primero tú Héctor y después yo, Pepe”, eso, sabemos que en la política no existe, la palabra de caballeros, sería infantil considerar que se acatará lo que no está escrito…y ese pacto de “machitos” sencillamente no se dará.
Ante la magnitud de los sucesos políticos, violentos y sociales del país, nada está escrito, precisamente por ello, aparecerán ventarrones de pronósticos reservados…quedando solamente la esperanza de un gran entusiasmo ciudadano para acudir a las urnas para votar libremente y con la conciencia plena de que el país, Veracruz y Coatepec, en el caso de las diputaciones, logre el esperado cambio.
Porque estamos de la chingada. |