En el caso de Xalapa, la ex delegada priista quedó bajo sospecha de haber solapado la venta de la regiduría primera de la alianza PRI-PVEM para un joven empresario sin militancia partidista, pero cuya familia es dueña de una antigua hacienda cafetalera donde en los últimos diez años se han desarrollado una docena de nuevos fraccionamientos residenciales.
Ahora, paradójicamente, el sucesor de Ochoa Pérez en la representación estatal de la SEGOB será el ex candidato del PRI a la alcaldía de Xalapa, Alejandro Montano Guzmán, quien desfondó al partido tricolor hasta el cuarto lugar de la votación por lo que solamente logró obtener una de las 13 regidurías del ayuntamiento capitalino.
El ex diputado local y federal priista, quien como nuevo representante de la SEGOB deberá coordinar a todos los delegados federales del estado, hizo campaña prácticamente solo porque no supo conciliar a la mayoría de los grupos del partido tricolor. A los operadores políticos del alcalde Américo Zúñiga Martínez los maltrató y hasta a jóvenes simpatizantes de Vía Veracruzana que le fueron a ofrecer su apoyo los menospreció.
Por eso mueve a risa el argumento de que Montano sustituirá a Ochoa Pérez para operar políticamente en las próximas elecciones a favor de los candidatos del PRI a la Presidencia de la República y a la gubernatura de Veracruz, cargo al que él aspiró también en la sucesión estatal de 2004.
Más bien despierta sospechas que el secretario Osorio Chong haya aprobado el nombramiento de Montano en el estado donde gobierna el panista Miguel Ángel Yunes Linares, viejo amigo del frustrado aspirante presidencial del PRI y cómplice del ex secretario alemanista de Seguridad Pública desde que éste le abría las puertas del despacho del gobernador Miguel Alemán Velasco en una fallida alianza que pretendía frenar las aspiraciones sucesorias de un enemigo político común: el senador Fidel Herrera Beltrán.
Y es que al menos eso se deduce de la versión que en su momento dio Eduardo “Tato” Vega Yunes, un sobrino de Yunes Linares que en 2012 contendió como candidato del PAN a la diputación federal por el octavo distrito electoral (Xalapa-Rural), en el que casualmente enfrentó a Montano como abanderado de la alianza PRI-PVEM.
Según “Tato” Vega, su tío habría negociado con el alemanista su elección, cuyo apretado y polémico triunfo no pudo impugnar ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación porque Yunes Linares, quien le había pedido todas las actas electorales, presuntamente dejó correr de manera deliberada el término del plazo legal para presentar el recurso de impugnación.
Por eso los Vega Yunes se distanciaron de Miguel Ángel Yunes y, en 2013, “Tato” se incorporó al gabinete del gobernador Javier Duarte, acérrimo enemigo de su tío, ocupando primero la Subsecretaría de Desarrollo Social y Humano de la Sedesol estatal, en enero de 2015, y posteriormente, en mayo de 2016, la Dirección de la Comisión de Agua del Estado de Veracruz (CAEV). |