Los tuxtlecos llevamos más de tres décadas en observar el infierno político que ha destruido cotidianamente la paz política de los diferentes sectores de la sociedad de los Tuxtlas. Para hacer historia, los graves problemas electorales se vivieron en la década de los noventa, en donde nació el Partido de la Revolución Democrática.

En medio de la fuerza del Sol Azteca, fue afectado el alcalde de aquel entonces, Rafael Carrión Álvarez, quien fue perjudicado entre las negociaciones del Perredismo Veracruzano y del Secretario de Gobernación, Fernando Gutiérrez Barrios, al haber sido obligado a renunciar a la alcaldía de San Andrés Tuxtla en su primer semana de gobierno municipal, ante la presión del líder perredista, Andrés Manuel López Obrador, quien curiosamente al  pernoctar en la cabecera distrital de los Tuxtlas, San Andrés, en su “Éxodo por la Democracia”, cumplió la petición del líder de los perredistas Sanandrescanos, Armando Aguirre Hervís, en el sentido de que separaran del cargo municipal al empresario “Fallo” Carrión, a quien le había ganado en las urnas, pero al final lo hicieron perder en la mesa de las negociaciones.  

A su paso por Veracruz, Andrés Manuel López Obrador y sus seguidores, ganaron muchos acuerdos políticos con el entonces Gobernador de Veracruz, Dante Delgado Rannauro, situación que afecto al Partido Revolucionario Institucional ante los amarres que consiguió en aquel entonces este joven Tabasqueño que apodaban el “Peje Lagarto”, quién con el tiempo, gracias a su habilidad de concertación, logró consumar su sueño de ser el presidente de México.

Ahora en la actualidad, “Aquí en los Tuxtlas” todo pasa y no pasa nada, pues poco ha cambiado  este solar Veracruzano políticamente. Y es que ante la llegada del nuevo Gobernador Cuitláhuac García Jiménez, quien es amigo del ejecutivo federal, Andrés Manuel López Obrador, entre los diferentes sectores que pertenecen a esta zona, empezaron fundados cuestionamientos en el sentido de que Cuitláhuac, deberá aprovechar este acercamiento con el Presidente de México, para  llevar recursos a muchas regiones desprotegidas, como los Tuxtlas, la cual a pesar de que cuenta con grandes recursos naturales, existe entre un gran sector de sus poblaciones hambre y miseria, ante la falta de fuentes de empleo y el real aprovechamiento del sector turístico, agrícola y ganadero.

Aquí en los Tuxtlas, cada seis años se hablado de grandes proyectos que sacarán de la marginación a hombres y mujeres, sin embargo todo se queda en puros rollos políticos, por lo que es necesario que el nuevo gobernador Cuitláhuac García Jiménez, se comprometa con los habitantes de esta parte de la entidad, porque los Tuxtlas es una región para presumirla, aunque la realidad es otra, porque en la actualidad miles de jóvenes están inmersos en la delincuencia, el alcoholismo y la drogadicción, ante la escasez de oportunidades. Diariamente, con todo y los apoyos sociales del gobierno estatal y federal, cientos de familias se marchan a los estados del norte y los Estados Unidos, en busca de trabajo, trayendo esto consigo que en un gran número de comunidades de los municipios Tuxtlecos, su mayor población sean mujeres y adultos mayores, porque los jóvenes y adultos se marchan de sus localidades en busca fuentes de empleo para mantener a sus familias. 

Hoy insistimos, la vida presenta al gobernador Cuitláhuac García Jiménez, la gran oportunidad de pasar a la historia  a través de su compromiso de gobernar para todos los Tuxtlecos, y confiamos que finalmente ayudará al desarrollo de este solar Veracruzano. Y nos vemos

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