Un hecho inusual en la historia de la política, al menos en lo que se tenga memoria, es el reciente triunfo que acaba de obtener el político veracruzano Antonio Benítez Lucho ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), al firmar el convenio con el cual, el instituto tendrá que pagar cinco millones de pesos al oriundo de Cosoleacaque.
¿Y por qué es inusual y aún mejor, por qué tendrían que pagar a Benítez Lucho?
Bueno, es inusual, porque de acuerdo a la praxis priísta (no sé si en otros partidos sea de otro modo), uno siempre trae la renuncia en la mano en el mismo momento en que reciben el cargo que les ha conferido el otrora partidazo, para que cuando llegue el relevo, sin chistar, desocupen las oficinas bajo el entendido de que con él se va la gente con la que llegó. En este caso, Benítez Lucho, rompió los esquemas del partido y demandó.
|
Ahora, ¿por qué tendría que pagar el IMSS a Benítez Lucho? simple, el priísta demandó su finiquito por el tiempo que estuvo al frente de la delegación del Seguro Social... algo así como cinco años prestando servicio a la patria.
Se insiste, es inusual y al parecer, en el caso del sexenio que concluye, será el único funcionario que se atrevió a generar con su demanda, un parteaguas en lo que son los institutos… y en lo que es la institucionalidad de la que tanto presumen los priístas.
Aunque a fuerza de ser sincero, todo indica que Benítez Lucho hizo un cálculo político a la hora de presentar esa demanda contra el IMSS… mire porqué:
A finales de mayo de este año, le pidieron el puesto a Benítez Lucho, es decir, a casi un mes de las elecciones. Como buen político de colmillo largo y retorcido, teniendo a Fidel Herrera Beltrán como maestro, es seguro que el nativo de Cosoleacaque ya tenía calculado que el PRI no iba a ganar… bueno, a ciencia cierta, hasta un mapache con dientes de leche, lo hubiera sabido… pero bueno.
El asunto es que ante el panorama tan sombrío que se cernía y cierne sobre el Revolucionario Institucional, Benítez Lucho pudo haber visto su futuro político inmediato más sombrío que el de su mismo partido, y optó entonces por perder lo “Institucional”, y proceder con esa famosa demanda.
Hablando de “institucionalidad”, hay que recordar que Benítez Lucho lo han apuntado sus “bienquerientes” para que se lance en pos de la dirigencia del PRI que hoy ocupa Américo Zúñiga Martínez. No se puede negar que es bien visto por un sector, en especial del lado del ala crítica del partido, aunque hay otro sector que califica a dicho segmento más bien como el ala “críptica” del PRI por representar todo lo que, suponen, la gente ya no quiere del Revolucionario Institucional.
Vamos, para nadie es un secreto que si Benítez Lucho llegara al edificio de Ruiz Cortines con Francisco Moreno, sería el regreso de Fidel Herrera Beltrán por partida doble… recuerden que también el de Nopaltepec mueve sus fichas en el Verde Ecologista… pero al final, todo esto de la dirigencia del partido no son más que puras especulaciones… lo cierto es el triunfo que en estos momentos hacen del futuro inmediato de Benítez Lucho, un remanso político, ahora que anda sin chamba… política, porque tampoco para nadie es un secreto que el ex delegado del IMSS es accionista en algunas empresas, en especial del ramo constructor, sector muy castigado al menos en estos últimos años…
Ahora, nomás le toca esperar a Benítez Lucho que se fije la fecha para que nomás extienda la mano y todo siga en paz… claro, siempre y cuando sus subdelegados de Veracruz, Poza Rica, Tuxpan, Martínez de la Torre y San Andrés Tuxtla, salgan bien de las observaciones que la Auditoría Superior de la Federación haya hecho… no vaya a ser que su finiquito se convierta en una bicoca comparado con lo que tenga que solventar su gente, a ya nada de acabar el sexenio…
Como sea, hay que felicitar a Benítez Lucho por su logro, porque en una de ésas, genera “jurisprudencia anti-institucional” en otros cargos, cuando pidan el relevo...
smcainito@gmail.com |