Ya que va a andar por estas tierras hoy propiedad de las bandas de la delincuencia organizada, sería bueno preguntarle al señor presidente Andrés Manuel López Obrador sobre las razones que tiene para no actuar, en el ejercicio de sus obligaciones, en contra de los que han saqueado al país, de los que él llama “la mafia del poder” y que nosotros, los chairos, conocemos como saqueadores o vulgares rateros.
A casi cuatro meses de distancia, desde que asumió la Presidencia, no hay un solo procesado del gabinete peñista por haber dispuesto del dinero de los mexicanos; la señora Rosario Robles Berlanga, señalada como una de las principales corruptas del peñismo, se pasea por el país y el extranjero como si tuviera la conciencia tranquila; los responsables del robo de combustible a Pemex, que durante años acumularon escandalosas riquezas del negocito que tenían saqueando a la trasnacional, no sabemos qué es de ellos, quiénes fueron y a qué se dedican; el jefe de la pandilla Carlos Romero Deschamps como si nada sigue disfrutando la vida mejor que cualquier jeque árabe.
En un desplegado aparecido en un medio Fifí como lo es Reforma, Romero Deschamps brinda todo su apoyo a la política presidencial pejista y con eso al parecer fue suficiente para indultarlo.
¿Un presidente puede hacer eso, perdonar a quienes sorprendió in fraganti robando las riquezas de la nación?, ¿su obligación no es procesarlos y entambarlos como lo prometió a lo largo de más de quince años de campaña permanente, en la que recorrió dos veces todos los municipios del país (el único político que lo ha hecho), llevando como bandera echar del poder a los del PRIAN y aplicarles los castigos a que se hicieran acreedores por sus actos de corrupción?... pensamos que sí. El hecho de que le hayan dejado el paso libre en el último mes de su campaña para que se sentara sin problemas en la silla presidencial, a cambio de olvidarse de aplicar la ley contra los corruptos, es un acto de traición a la patria y don López Obrador lo está haciendo.
En el caso de Veracruz pasa lo mismo. Miguel Ángel Yunes Linares dejó hecho un desastre todas las áreas de la administración pública, saqueó todo lo que pudo y el dinero lo invirtió en la campaña de promoción de su hijo Yunes Márquez al gobierno, cometió cualquier cantidad de abusos al amparo del poder, encarceló o, más bien, privó de su libertad a ex funcionarios en plan de venganza o para simular que estaba combatiendo al duartismo, lo que también es un delito, cuando menos secuestro, y resulta que no pasa nada.
Salvo las amenazas que eventualmente lanza el titular del Orfis Lorenzo Antonio Portilla, o las declaraciones de los titulares de las dependencias que denuncian en los medios saqueos a las instituciones que les encomendaron dirigir, nada, una acción concreta no se ve, y lo que la opinión pública piensa es que no tiene sentido demandar a los funcionarios yunistas estando al frente de la Fiscalía uno de ellos, Jorge Winckler Ortiz, a quien no han podido quitar por ineficientes.
¿Qué es lo que nos queda a los veracruzanos?, clamar apoyo real al presidente Andrés Manuel López Obrador para que las cosas se compongan en la entidad, al menos con la salida del Fiscal que obstruye la aplicación de la justicia y pone a los habitantes del estado indefensos ante la delincuencia.
Por eso, el grito de “¡Este apoyo no se ve, este apoyo no se ve!”, apenas queda justo para hacerlo hoy ante el presidente de todos los mexicanos, el mesiánico señor López Obrador.
La biblia de la comunicación
Desde el desafortunado “No traigo cash”, de Zedillo, hasta el “Yo no soy la señora de la casa” de Peña Nieto, constantemente presenciamos cómo los funcionarios públicos o los líderes de las organizaciones nos regalan declaraciones fallidas que no solo desvirtúan su imagen pública sino que amenazan con echar por tierra una larga trayectoria.
Algunos nacen con el don de la palabra. Pero son unos pocos. La mayoría, sin embargo, puede entrenarse de forma sistemática para cautivar, seducir e influir en sus audiencias. Esa es la meta de un vocero exitoso.
La biblia de la comunicación eficaz, editado por Paidós, ofrece paso a paso una serie de herramientas útiles y puntuales que dotan al lector de lo que necesita para convertirse en un comunicador eficaz y memorable, tanto en intervenciones mediáticas como en presentaciones públicas relevantes o incluso ante sus colegas.
Este libro de Ana Paula Ugalde Haro es una obra completa sobre los aspectos que abarca la vocería. Tiene recomendaciones prácticas de muy fácil implementación.
Ana Paula Ugalde Haro es egresada de la carrera de Comunicación en la Universidad Iberoamericana. Cuenta con un diplomado en Estrategias de Comunicación Política en la misma institución y maestría en Análisis Político y Medios de Información en el ITESM. Desde hace más de 18 años trabaja como consultora especializada en el diseño e implementación de estrategias de comunicación, así como en la formación de voceros. Ha capacitado a más de cinco mil personas de instituciones públicas y privadas, y su experiencia abarca también el trabajo con altos funcionarios públicos en campañas políticas a nivel municipal, estatal y federal.
Ojalá los encargados de la comunicación del nuevo gobierno pudieran leer este texto.
Ya no hay virginias
La tradición de casarse con un vestido blanco es bastante romántica y una gran ilusión para muchas mujeres. El blanco del vestido, se supone que representa la pureza de la novia.
En la actualidad, es bien sabido que gran parte de la población no llega casta al matrimonio, y aún así, las novias siguen usando el vestido blanco. Debido a esto, surgió en el Vaticano una propuesta bastante extraña. Supuestamente, a partir del próximo año, aquellas mujeres que quieran casarse de blanco, deberán presentar certificado de virginidad.
La religión y sus costumbres: En la Iglesia católica no es bien visto que las parejas no lleguen al altar sin ser tocadas, en especial con las mujeres. Es por ello que una mujer que quiera usar un vestido blanco en su boda tendrá que llegar casta y pura hasta el día de su matrimonio.
De lo contrario, cuando una mujer ya ha practicado sexo fuera del matrimonio, se considera como impura y pecadora. Esto, debido a que mantuvo relaciones sin haber tenido una unión ‘oficial’ ante los ojos de Dios.
El vestido blanco y su significado: Como bien se mencionó anteriormente, el vestido blanco simboliza la pureza de la novia. Este vestido debe representar que la novia está libre de pecado y que aún se conserva virgen.
Morir dignamente
Anoche mi mamá y yo estábamos sentados en la sala hablando de las muchas cosas de la vida. La charla se volvió más profunda, seria y dramática cuando empezamos a hablar sobre la vida y la muerte... Le dije: "Mamá, nunca me dejes vivir en estado vegetativo, dependiendo de máquinas y líquidos de una botella. Si me ves en ese estado, por favor desenchufa los artefactos que me mantienen vivo y bota los líquidos de los cuales dependa, prefiero morir".
Entonces, mi mamá se levantó y me miró con una cara de admiración que yo nunca le había visto. Y me desenchufó: el celular, la televisión, la computadora, el iPod, la tablet y el internet... ¡y me tiró el Mezcal, el Tequila, el Whisky, el Ron y todas las cervezas!, ¡Ay, cabrón,... casi me muero!...
Esto es para despedir la semana cuando menos con una sonrisa.
REFLEXIÓN
¿Si a la prensa “Fifi” como Carlos Loret de Mola, la amenazan de muerte los cárteles, qué esperamos nosotros los periodistas chairos?... Dios nos libre. Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx formatosiete@gmail.com www.formato7.com/columnistas |
