YA NO SABEN CÓMO QUITARLES LAS BECAS A LOS JÓVENES. A muchos jóvenes estudiantes por un lado los estimulan con becas y por otro se los quitan de las manos mediante medidas al viejo estilo de las ‘Tiendas de raya’. Resulta que esta mañana durante el Consejo de Directores de COBAEV, los responsables de los planteles fueron informados que los estudiantes deberán pagar un aproximado de 494 pesos por la adquisición de libros de texto, que serán elaborados exclusivamente para el Subsistema mencionado. Y pues algo que parece normal pues había sido en modus vivendum del saqueo que se cometía en regímenes educativos anteriores, se contradice hoy con los postulados de la 4T con respecto al abatimiento de la corrupción. Y lo anterior es tanto corrupción económica como violación de las tendencias internacionales de educación en el nivel medio superior. En primer lugar, huele a corrupción porque se obliga a los alumnos a adquirir los libros a chaleco. No se sabe si su adquisición a nivel global fue licitada y de dónde se obtuvo o se llegó a la conclusión de que su costo casi sea de 500 pesos; cantidad que mermará definitivamente el apoyo que le da bimestralmente el Gobierno Federal a los alumnos. Además, tal decisión afectará la ya de por sí lastimada economía de las familias de los municipios del estado. Y, va en contra de las tendencias internacionales de educación en el nivel medio superior, en primer lugar, porque la sustentabilidad hoy nos lleva a la utilización de las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (Tic), menos papel y más opciones de búsqueda y de consulta, una visión compleja, diversa y transversal no se logra con la consulta de un autor, sino de varios, un retroceso educativo del que tendría que rendir cuentas el titular de la SEV o en de la SEP en su caso.
LA ESTÉRIL LUCHA ENTRE EL GOBIERNO Y EL FISCAL, nadie la ve y a ni le importa. ¡No más show! ¡No más circo! A la ciudadanía le importa un comino la estéril lucha entre el Gobierno del Estado y el Fiscal Jorge Winckler Ortiz. A nadie le importa realmente pues lo que quieren en seguridad, y cada vez que salen a los micrófonos ya sea el gobernador Cuitláhuac García; el Secretario de Gobierno, Eric Cisneros; o el propio Fiscal, Jorge Winckler; a tirarse mutuamente cacayacas, lo único que logran es perder bonus político. A Winckler no lo pudieron quitar pese a tener la mayoría del Congreso. Como dijera el clásico promotor de la Cultura Económica del país, “se las metieron doblada”, y la ciudadanía eso sí lo vio y lo percibió como algo real. De allí en fuera, cada denuncia mal hecha presentada ante la instancia que gusten y manden, solo sirve para que la ciudadanía se siga pitorreando de las autoridades que tienen que ir a poner su carita de palo y tomarse la foto como niños regañados. ¿Nadie puede decirle al gobernador que esa es una lucha que no se debe pelear así? ¿Nadie le puede asesorar en materia de comunicación para advertirle que el mensaje que envía no es el adecuado? ¿Que cada que se queja del Fiscal sólo provoca la sorna? Este mismo martes el Secretario de Gobierno Eric Cisneros Burgos presentó una nueva denuncia ahora por “ocultar órdenes de aprehensión”, pues hay “presunta dilación de justicia y ocultamiento, no las reportan en Plataforma México”. ¿Hasta cuándo debe la ciudadanía seguir siendo testigo de calidad en esta lucha que nada bueno deja? Los veracruzanos quieren resultados, no más circo, no más show.
DOBLE MORAL DE LAS GRANDES TIENDAS DE AUTOSERVICIO. Luego de que el Congreso del Estado de Veracruz aprobara la medida para que no se expendieran más bolsas de plástico en los supermercados y tiendas de autoservicio, éstas inmediatamente le encontraron el lado bonito a la disposición y hacen pingües negocios a costillas de los usuarios. La medida impulsada por el Congreso, desafortunadamente, quedó incompleta, pues en el afán de sacarla al vapor sólo consideró que ya no se expendieran plásticos, cuando que lo mejor hubiera sido que las tiendas de autoservicio y los grandes almacenes, optaran “obligatoriamente”, por la utilización de bolsas recicladas y biodegradables. Esto es, no se trata de quitarle a las grandes compañías el costo financiero del empaquetado, sino que ellas deberían optar por otros sistemas como las bolsas de papel reciclado o incluso que esas bolsas “ecológicas” que tan displicentemente ponen a la venta, deberían entregarlas sin costo extra a los usuarios. Las grandes compañías se han hecho multimillonarias a costa de las cadenas productivas, reduciendo a casi nada las ganancias de los pequeños productores y vendiendo al costo que les venga en gana sus productos, y ahora, encima de eso, ni siquiera tendrán que pagar por el embolsado. Es una vergüenza que tiendas como Chedraui se digan que están a favor del medio ambiente al no dar bolsas a partir del 1 de agosto, cuando en realidad lo único que ven son sus ganancias. Tampoco se trata de ponerse -como diría el Secretario de Salud- a que "ningún chile embone", pues muchos seguramente aplaudirán la medida de Chedraui y otras tiendas departamentales, de lo que se trata es que los costos no sean trasladados a los consumidores y que si en verdad se ponen en un plan de cuidado al medio ambiente, que también se opte por medidas de reutilización, reciclado y biodegradación.
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