Ya no vemos a Peña Nieto sonreír, bailar y besar a la novia. Ahora parece un avestruz, con la cabeza enterada y sin decir nada a su favor o de quienes fueron sus colaboradores.
El que sería jefe político de ese grupo simple y llanamente los ha dejado solos valiéndole un carajo la lealtad demostrada en su administración presidencial y cuando fue Gobernador del Estado de México.
Por lo que hemos podido ver, solo le importa su pellejo. No es raro, esa generación de políticos jóvenes se formaron sin los principales valores de la política. Usan a la gente y la tiran cuando ya no les sirve, si bien les va, por que si necesitan chivos expiatorios, los entregan.
Peña Nieto no solo no ha salido a defender a sus ex colaboradores, ni siquiera ha defendido lo que fuera su presidencia, sus acciones, su visón de estado.
Es un ex Presidente acobardado, que ha preferido la denostación que la defensa. Ha abandonado a los suyos y estos podrían involucrarlo y hundirlo en cualquier momento.
Mucho se critica el activismo en redes de los ex presidentes Fox y Calderón, se dirá o que se quiera, pero al menos estos si tienen agallas o al menos no están comprometidos.
Penoso el caso de esa generación de políticos de papel, traidores, taimados, vacíos y ahora tan solos.
Hoy día varios están en la cárcel y otros operan para partidos distintos desde antes de que se hundiera el barco.
Aquí en el estado hay varios de ellos.
ALITO
Alejandro Moreno asumió como dirigente nacional del PRI. Más allá del discurso, veremos con acciones, si en verdad serán un partido opositor serio o van a darle la razón a quienes apuestan que serán un partido satélite de Morena para detener al PAN en las intermedias legislativas y de renovación de ocho gubernaturas.
No habrá que esperar mucho para saberlo. |