Este texto se publicó el 10 de junio del 2016, en la columna Bajo Reserva del rotativo de circulación nacional El Universal.
“Muy cómodos y en gran charla, dos personajes de la vida pública se encontraron en una mesa del restaurante Lipp de Polanco. El virtual ganador de los comicios para el gobierno de Veracruz, el panista Miguel Ángel Yunes Linares, y el ex secretario de Seguridad Pública federal Genaro García Luna, llamaron la atención de los comensales, pues en tiempos pasados convergieron en las áreas más sensibles de la seguridad nacional y, ambos, no con muy buenos recuerdos.
“Nos comentan que el encuentro cobra relevancia: don Miguel Ángel está en el centro de la discusión y en pelea política por su reciente participación en la contienda electoral veracruzana y don Genaro se halla en estratégico repliegue de la vida pública luego de su polémico desempeño como secretario de la extinta SSP en el gobierno calderonista.
“¿Será posible que Yunes Linares esté planeando rescatar a tan polémico policía o solamente fue un encuentro para escuchar los consejos de don Genaro, quien ahora maneja una consultoría en seguridad?”
Este texto refleja la cercana relación de amistad, y por qué no, de complicidad, que ha existido entre ambos personajes, psicológicamente con el mismo perfil criminal, quienes coincidieron en la administración del presidente Felipe Calderón Hinojosa, en el área de seguridad pública nacional donde se relacionaron los principales capos de la droga, como Joaquín “El Chapo” Guzmán.
El Chapo escapó del penal de alta seguridad de Puente Grande con el apoyo de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública federal, cuando el encargado del área de prevención (penales) era Enrique Pérez Rodríguez, extitular de la SEV y un policía profesional que puso al frente de la administración de ese CEFERESO a un sobrino, el contador xalapeño Andrés Domínguez, para consumar esta célebre fuga.
A Yunes Linares nada lo acalambra de las acusaciones que se han hecho en su contra, sobre todo las de la periodista Lydia Cacho, en su libro Los demonios del Edén, donde Yunes es protagonista de un pasaje de pederastia, el cual le ha hecho, hasta nuestro tiempo, lo que el viento a Juárez.
Con la soberbia elevada a la décima potencia, Yunes Linares ha hecho lo que ha querido a lo largo de su trayectoria dentro del servicio público, siempre al amparado de amigos poderosos como Miguel Ángel Osorio Chong, burlando la ley.
Ha pisoteado los derechos ciudadanos de quienes ha querido, obligó a los ladrones del sexenio de Javier Duarte a entregarle lo robado a cambio de impunidad, usó los recursos de sus dos años de gobierno para invertirlos en la campaña de su hijo a la gubernatura del estado, perdió y, hasta el momento, aunque le haya gritado infinidad de veces ¡loco! al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se ha mantenido impune.
Incluso se ha burlado de los integrantes del gabinete del gobernador Cuitláhuac García Jiménez que lo han intentado llevar ante la justicia por la infinidad de delitos que ha cometido, y nada ha funcionado para detener a este enemigo de la sociedad veracruzana, refugiado en el Partido Acción Nacional.
Yunes no será eterno
Pero como todo en la vida tiene un fin, el reinado del atrabiliario Yunes Linares este martes se comenzó a tambalear con la noticia de que el Gobierno de Estados Unidos había concretado la detención del ex secretario de Seguridad Pública federal (2006-2012), Genaro García Luna, acusado de tres cargos de conspiración y declaraciones falsas que permitieron la libre operación del Cartel de Sinaloa para traficar cocaína a cambio de millonarios sobornos.
De acuerdo con información del Departamento de Justicia de los Estados Unidos, la acusación que fue revelada radica en un tribunal federal de Brooklyn.
García Luna, quien tiene domicilio en Miami, Florida, fue arrestado este martes por agentes federales en Dallas, Texas, y será enviado al Distrito Este de Nueva York para enfrentar estos cargos.
García Luna está acusado de aceptar millones de dólares en sobornos del Cártel de Sinaloa, de “El Chapo” Guzmán, mientras controlaba la Policía Federal de México y era responsable de garantizar la seguridad pública en México, declaró Richard P. Donoghue, Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Este de Nueva York. En aquel tiempo, Miguel Ángel Yunes Linares era su mano derecha, su principal colaborador.
“El arresto de hoy demuestra nuestra determinación de llevar ante la justicia a quienes ayudan a los carteles a infligir daños devastadores en los Estados Unidos y México, independientemente de los cargos que mantuvieron mientras cometían sus crímenes", afirmó Donoghue quien agradeció a las oficinas de la Administración de Control de Drogas (DEA) en Nueva York y Houston, Investigaciones de Seguridad Nacional, Oficina de Campo de Nueva York (HSI), Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) y Policía del Estado de Nueva York (NYSP) por su trabajo en el caso.
Según la acusación y otras actuaciones judiciales del gobierno, de 2001 a 2012, mientras ocupaba puestos de alto rango en el gobierno mexicano, García Luna recibió millones de dólares en sobornos del Cartel de Sinaloa a cambio de proporcionar protección para el tráfico de drogas y trata de personas.
De 2001 a 2005, García Luna dirigió la Agencia Federal de Investigación de México, durante el sexenio de Vicente Fox, y de 2006 a 2012, durante la gestión de Felipe Calderón, se desempeñó como Secretario de Seguridad Pública federal, en cuyo control recaía la Policía Federal.
“A cambio del pago de sobornos, el Cartel de Sinaloa obtuvo un pasaje seguro para sus envíos de drogas, información confidencial de las fuerzas del orden sobre investigaciones sobre el Cartel e información sobre carteles rivales de drogas, lo que facilitó la importación de cantidades de toneladas de cocaína y otras drogas en los Estados Unidos”, refirió el comunicado del Departamento de Justicia.
“En dos ocasiones, el Cartel entregó personalmente sobornos a García Luna en maletines que contenían entre tres y cinco millones de dólares”
Señala que según los registros financieros obtenidos, cuando García Luna se mudó a los Estados Unidos en 2012, había acumulado una fortuna personal de millones de dólares.
Desde este martes, y ahora sí, Miguel Ángel Yunes Linares no logra conciliar el sueño. Su socio ha caído y cuando declare ante las autoridades norteamericanas, el nombre del choleño saldrá a relucir irremediablemente… ¿Yunes con los días contados?
No habrá Pepsi
Una buena noticia, sin duda, fue la que dio ayer el secretario de Educación de Veracruz, Roberto Zenyazen Escobar García, quien aseguró que la venta del refresco Pepsi y de cualquier otro en las escuelas públicas se acabó, pues dijo que a petición del gobernador Cuitláhuac García, no se venderá ningún refresco en las escuelas públicas para proteger la salud de los niños veracruzanos.
«No hay convenio con nadie, y el convenio del que se había hablado con PEPSI, nunca se dio, hubo un ofrecimiento de cuatro millones de pesos en efectivo, y otros dos millones en imagen institucional, pero el gobernador Cuitláhuac García consideró que para proteger la salud de los niños y jóvenes veracruzanos, es que no se venda ningún tipo de refresco en las escuelas públicas del estado, y que por medio de la SEV se les insista a los directivos de las escuelas para fomentar el ejercicio y los alimentos sanos, naturales, nutritivos entre nuestros niños y jóvenes.”
El titular de la SEV ha dicho que responde a la demanda de la sociedad de padres de familia, de otros diputados de oposición y por orden del gobernador del estado Cuitláhuac García Jiménez, y se da marcha atrás en el convenio que se pretendía establecer con PEPSI, y se solicitará a todas las cooperativas escolares que solo vendan agua natural o de frutas naturales.
REFLEXIÓN
Bajo juramento, el hermano de El Mayo asegura que sobornaron a Genaro García Luna y a un cercano a AMLO… Los gringos le aprietan los esos al Peje. Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx | formatosiete@gmail.com |
