La razón por la que las y los senadores intervienen en tan importante determinación se basa en la facultad que para ello les otorga el artículo 116 en su fracción IV, inciso e) de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que a la letra dice:
"Las autoridades electorales jurisdiccionales se integrarán por un número impar de magistrados, quienes serán electos por las dos terceras partes de los miembros presentes de la Cámara de Senadores, previa convocatoria pública, en los términos que determine la ley".
Es de esta manera como un grupo de mujeres y hombres han expresado su interés por integrar este organismo, al menos poco más de dos decenas lo han manifestado:
1. Goxcon Alejo María Candelaria; 2. Hernández García Julia; 3. Ortega Guzmán Adriana; 4. Hernández Ribbon Lorena; 5. Vásquez Muñoz Tania Celina; 6. Osorio Domínguez María Félix; 7. García Utrera Jesús Pablo; 8. De la Torre Jaramillo Eduardo Sergio; 9. Hernández Hernández José; 10. Portilla Romero Mariana; 11. Adriano Fabre Armando; 12. Sagastume Márquez Yolanda; 13. Pérez Espinoza Emmanuel; 14. Pozos Alarcón Maribel; 15. Pérez Reyes Héctor Manuel; 16. García Pérez Erika; 17. Valencia Soto Carla; 18. Garduño Rosales Ricardo ; 19. Rodríguez Sangabriel Alba Esther; 20. Casas Castillo Hugo Enrique; 21. Domínguez Gudini Jacobo Alejandro; 22. Lozano Ordoñez Jonathan Máximo; 23. Tomás Toledo Benito; 24. Servín Rodríguez Christopher Alexis; 25. Báez Méndez Anastacio; 26. Calderón Serrano Leopoldo; 27. Bielma Martínez José Luis; 28. Hernández Hernández Magdalena.
Lo interesante del asunto es que al parecer los hombres que han mostrado su interés por inscribirse o no leen bien o nunca se enteraron que la magistratura en disputa por tema de paridad corresponderá a una mujer.
Al menos así lo señala la convocatoria emitida por la Junta de Coordinación Política del Senado, en su numeral décimo primera, el cual expresa: “Una vez recibido el listado de las y los candidatos, la Junta de Coordinación Política propondrá mediante Acuerdo al Pleno de la Cámara de Senadores, el nombre de las candidatas o candidatos que considere sean elegibles para cubrir las vacantes de Magistrada o Magistrado de los Órganos Jurisdiccionales Electorales Locales, o bien aquellos que pudieran ser reelectos, por un periodo de 7 años, observando el principio de paridad y alternando el género mayoritario; como lo señala el numeral 1 del artículo 106 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales.”
Y es que si observamos que en la integración previa el género mayoritario eran hombres –pues se recordará que quienes fueron electos fueron: Javier Hernández Hernández, por 3 años; José Oliveros Ruiz, por 5 años; y Roberto Eduardo Sigala Aguilar, por 7 años-; la siguiente elección corresponderá a una mujer.
Por increíble que parezca los varones que se enrolaron o no saben leer o no creen en la paridad de género o son muy ingenuos, pues no es comprensible que, siendo conocedores del derecho, hayan intentado inscribirse para ocupar un espacio que ya sabemos por paridad a quien corresponde.
El tema ya comienza a tomarse a cotorreo entre los especialistas quienes a modo de broma se cuestionan si estos personajes ¿se habrán hecho la Operación Jarocha?
Así las ansias por insertarse nuevamente en el presupuesto público.
Al tiempo.
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