Mutatis Mutandis.
Rafael Arias Hernández.
 

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Navidades de pobreza, esperanza y amor
2017-12-26

A 338 días, del final del mini gobierno del PANRD, empeora la  situación en la que sobreviven los veracruzanos. 


Pobres y más pobres, en una inseguridad que aumenta, hasta convertirse en ejemplo mundial.


Para colmo, excepciones aparte, no hay servidores públicos ni para remedio, porque como en todo el país, son arrastrados por el torrente de las elecciones.


La supuesta renovación democrática, mantiene preocupados y ocupados a los presuntos responsables y prófugos potenciales que, por su conocido y cuestionado desempeño, pueden acabar en la cárcel; y,  en general alienta a quienes aspiran o detentan el poder oficial para beneficio personal, familiar o de grupo. 


Renovación que también da oportunidad y muestra,  la inocultable presencia, operación y  manipulación del hampa electoral dentro y fuera de los gobiernos. 


Repetida historia de uso y abuso del presupuesto oficial, para despensas, asistencialismo clientelar y condicionamiento de apoyos.


La realidad gubernamental federal, estatal y municipal impuesta, hasta hoy  es, en general,  de más de lo mismo. Situación que  agravan  contextos nacional e internacional adversos. 


La responsabilidad presupuestal institucional acumula errores y horrores; con una cada vez más cara e ineficiente burocracia;  creciente  deuda pública, fortaleciendo cuantiosos beneficios privados a costa del esclavismo financiero de la población presente y futura;   descarado negocio de  concesiones y privatizaciones, a partir de la promovida pérdida del patrimonio público y los servicios básicos ;   debilitamiento y quiebra de  instituciones gubernamentales; y  falta de participación y evaluación ciudadana y social, que legitime a los cada vez más autoritarios e insensatos gobiernos., 


En los hechos no hay cambios con resultados  para mejorar, ni estrategia oficial congruente, ni información pública accesible y suficiente; y muchos menos, verdadera  fiscalización  y evaluación y control, ante un sistema de continuidad de la impunidad. 


Acaso,  escasas contenciones y algunos aislados intentos sin consolidar; eso sí, excusas recurrentes y pretextos sin fin; así como repetidos escándalos, distractores y manipuladores de  opinión pública y atención de la sociedad, como la del villano favorito y el  auto promovido superhéroe; o la de la cínica manipulación mediática con cargo al presupuesto.


El gran reto de siempre es el de generar y consolidar el cambio gubernamental y social, para avanzar y mejorar. ¿Cómo hacerlo y en que formas? ¿Por y para quienes?  


Esfuerzo que nunca termina. Ensayo y corrección del error. Presencia y participación; organización y movilización.


Todo a partir de principios simples y sencillos.


No pedir permiso para ejercer responsablemente, derechos y libertades ciudadanas; y exigir siempre sin excepción,  el cumplimiento puntual de deberes y obligaciones a gobernantes,  funcionarios y servidores públicos. 


En fin, reanudar el esfuerzo, 


no claudicar y perseverar.


De ahí que se debe insistir en las imprescindibles transparencia, acceso a la información, rendición de cuentas, fiscalización y evaluación social.


Injustificables la desinformación y simulación, obligados todos a  insistir, preguntar y preguntar:


¿De qué tamaño es el daño recibido y cuál es ya, el acumulado? ¿A cuánto asciende el total-total de deuda pública estatal y municipal? ¿Dónde están los miles de millones de pesos presupuestados y desaparecidos? ¿Y los resultados de la entrega recepción? ¿Cuántos despedidos y cuántos nuevos contratados van? ¿Renovar o autorizar más concesiones y privatizaciones, para beneficiar a quienes? ¿Cuál es el costo de la reestructuración de la deuda? ¿Por qué los descomunales y ofensivos súper sueldos, prestaciones y beneficios, a funcionarios? 


CÍRCULOS VICIOSOS.


No al reduccionismo manipulador y convenenciero. 


Al problema ancestral de pobreza, hambre y marginación, Al reto permanente de impulsar economía, empleo, ingreso y prestaciones dignas. A la vieja y nueva aspiración de aumentar bienestar social y calidad de vida. 


A todo esto y más, en estos días hay que agregar el hartazgo social, la pérdida de credibilidad y confianza en políticos y gobernantes, burócratas y parásitos del presupuesto oficial.


Es inocultable que unos y otros, unidos en perversidad o mediocridad, en  acción u omisión, debilitan aún más, las  dependencias e instituciones gubernamentales, de todos niveles. Convirtiendo al remedio en enfermedad, o en parte de ella.


De ahí que es importante resaltar que, en efecto, la crisis institucional no solo abarca importantes aspectos de la administración y las finanzas públicas, sino que también se extiende a un debilitamiento y empobrecimiento institucional en aumento. 


Fácil favorecerse, con la costosa salida de crear nuevas dependencias o aumentar las existentes. Poco o nada resuelve, probado está que solo se incrementa nómina y burocracia.


Ineficiencia, corrupción y simulación, presentes en la vida cotidiana. 


Imprescindible repetirlo, frente a estos colosales y nuevos desafíos, en general imperan mismas fórmulas y  medidas experimentadas. 


Y eso que supuestamente, estos son gobiernos del cambio. 


No entienden ni aceptan, la rapidez con que se difunden información, ideas y opiniones; y se identifican y señalan fracasos, daños y pérdidas, así como a los responsables. 


Una vez más, desde siempre: presente negado, futuro cancelado. 


NATIVITAS DE POBRES.


En diciembre, “Guadalupe-Reyes”, es un período especial para los mexicanos. Un “tiempo cuántico” de escape, un “hoyo negro” repleto de fiestas y festejos, religiosos y comerciales; pero también, para algunos es “tiempo de fortalecer la impunidad”, porque se aprovecha la inigualable oportunidad para que gobernantes delincuentes se cubran, justifiquen o anticipen leyes, acciones y disposiciones desfavorables a la población presente y a las futuras generaciones. Total, pocos o nadie reacciona. “Palo dado…ni Dios lo quita”


“Tiempo del arco del triunfo”, por el que se pasa a los supuestos poderes independientes. “Tiempo del autoritarismo y la arbitrariedad, del sí señor”.


Período ideal,  para no justificar presupuestos, saquear y aprobarse, con la mayoría de un Congreso cómplice, más gasto, más deuda y más privatizaciones.


En dicho período,  también se celebra la imposición romana del nacimiento judío en un pesebre,  del Dios nacido y muerto pobre. Celebración que distingue a quienes defienden orígenes y objetivos centrales, del que murió en la cruz y enfrento un imperio que, también gobernado por delincuentes, después  aprovechó y oficializo esa religión. 


En fin, tiempo de recobrar en verdad la Navidad del Dios pobre y de los pobres, rica en expresiones de esperanza, solidaridad y amor.


-Academico.IIESESUV @RafaelAriasH, Facebook: VeracruzHoydeRafaelAriasH

 
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