Como dato curioso, Alba Leonila comentó que aunque ya ha sido diputada federal dos veces, una vez diputada local y presidenta municipal de Aztalan, en realidad ella proviene de cuna humilde, de la comunidad Plan de Arroyos en el municipio de Atzalan. Por esto, cuenta que en su primera experiencia como candidata no tenía ni siquiera para imprimir trípticos y que hizo algunos con una impresora prestada y un tóner que le obsequiaron, y como tenía tan poquitos les pedía a quienes se los daba “que los leyeran y que por favor después se los devolvieran”, y como esto incomodaba un poco a la gente optó por dejar que se los quedaran pero le pidió a un ayudante que en cuanto los tiraran, los recogieran para volverlos a usar. Después, cuando ganó como diputada federal, cuenta que no tenía ni vehículo y que un amigo le prestó un Vochito, con el que llegó a San Lázaro y que por ir en ese VW no la dejaban entrar pues no creían que fuera diputada. Comentó, de refilón, que aunque ha sido incluso hasta empleada de primer nivel en el gobierno federal, ni de chiste ha tenido los recursos para hacerse una casa tan grande como la de su excompañero de partido, Miguel Ángel Yunes. |
