Los sabios de la política dicen que Televisa (y sus malas mañas) ya tomó partido y el próximo lunes inicia la fiesta grande contra el Gobernador Electo de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares. Así, la batalla se volvería campal y la moverían de Veracruz al plano de los grandes intereses nacionales. Justo cuando lo que se requiere son fórmulas de unidad, los políticos y empresarios detrás del PAN y del PRI escogieron el camino de la guerra. Si Veracruz corría el riesgo de incendio de ganar la partida final los que pretenden cerrarle el paso de Yunes Linares a Palacio de Gobierno, ahora será el país el que corra ese riesgo. Lo escondido tendrá nombre y apellido después del uno de diciembre según lo ha anunciado el propio Yunes Linares, y los trapitos de Peña Nieto y del que se fue, volarán por los aires y se convertirán en la gran bandera política para el 2018. Los locos se apoderaron del manicomio. El anciano régimen parece exhalar sus últimos estertores… ¿Qué sigue, un gobierno de coalición o una revolución? Canillazos para los que se olvidaron que en paz robaban mejor. |