En momentos de desolación económica como los que viven ciudades como Coatzacoalcos y Poza Rica, con miles de veracruzanos desempleados, llega una luz de esperanza con el anuncio de que PEMEX se asoció por primera vez en su historia con una empresa privada para trabajar en aguas profundas del Golfo de México. Mucho se había comentado de que aunque había Reforma Energética, PEMEX seguía entrando solo a aguas someras; ahora, entre PEMEX y la australiana BHP Billiton Petróleo Operaciones de México, trabajarán el Proyecto Trión, que según cálculos tiene 485 millones de barriles de hidrocarburos y que alcanzaría su primera producción en el 2023. La inversión es brutal, se necesitan al menos 11 mil millones de dólares, pero el Estado Mexicano recibirá el 72.4% de las utilidades. Es una ventana de luz, pues se adelgaza el Fondo Petrolero (de enero a octubre del 2016, las transferencias del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo cayeron 25.5%), mientras que Osorio Chong reconoció que el 2017 será más difícil por los bajos precios del petróleo y el entorno internacional adverso. |