Criticas que a él le hubieran quedado a la medida.
Ya olvidaron sus encendidos discursos en contra del sistema.
Criticó a los líderes que buscan eternizarse en el poder y buscan dejar delfines para seguir “mangoneando”.
Bueno fuera, dijo, que los gobernantes aunque roben, al término de su mandado se fueran a su casa.
Solo que a Fox se le olvidan las maromas que hizo para colocar a su esposa Martha Sahagún como candidata del PAN a la Presidencia.
Genio y figura. |