Bien por las autoridades federales que se sentaron el día de hoy por la tarde con los alcaldes veracruzanos que se metieron en el berenjenal de utilizar los recursos del FISM 2017 para poder pagar las obras que quedaron inconclusas del 2016.
Todo este lío, obviamente, es la herencia de la retención de participaciones federales por parte del gobierno de Javier Duarte, y los alcaldes ahora están en el brete de que -pese a que el Congreso y el ORFIS se lo autorizaron- la SEDESOL federal comentó la posibilidad de un daño patrimonial por esa utilización de recursos.
Lo bueno es que las autoridades federales se están poniendo las pilas, y alrededor de media centena de alcaldes estuvieron hoy en el Senado para dialogar y buscar una solución.
|