Columna Política Express



La voracidad de Maru Pinete y Héctor Yunes, deja sin chamba a la suplente, que se quedó chiflando en la loma.


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Redacción
2018-05-29  
20:10

¿Recuerda lo que le comentamos como primicia el 21 de mayo, que a media campaña Maru Pinete regresaba a San Lázaro?


Dicho comentario generó enojo entre los seguidores de Maru que tuvieron que aguantar porque era cierto, aunque lo mantenían muy escondido.


Ahora, Rosalba Santiago Escobar, diputada federal suplente de Maru, acusó de bloqueo político y laboral a Héctor Yunes Landa.


Explicó que ella se desempeñaba como directora del Centro de la Comisión Nacional de Desarrollo de Pueblos Indígenas (CDI) en Chicontepec; pero al nombrar a Pinete como aspirante a la Senaduría, tuvo que cubrir su espacio desde el 3 de abril en la Cámara de Diputados.


Posteriormente fue separada del cargo federal, con estricto apego a la ley y de lo cual no se queja, pero solicitó volver a su cargo anterior en el CDI, algo que le prometió cumpliría Héctor Yunes, situación que sigue sin cumplir.


Hoy, Rosalba se quedó sin diputación y sin chamba, y todo porque Pinete quiso regresar al Congreso, ¿A qué? ¡A nada! ¡Sólo a cobrar!

 
 
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