Luego de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador asegurara que se buscará renegociar los términos de los contratos de los siete gasoductos detenidos en México, autoridades de la CFE se han puesto las pilas y renace la esperanza de que por fin se concluya el Gasoducto Tuxpan-Tula y Tula-Villa de Reyes, que atraviesan los estados de Veracruz e Hidalgo y que en conjunto suman alrededor de 1,600 kilómetros, eso sin contar la construcción del gasoducto marino Texas-Tuxpan.
En Veracruz la construcción del gasoducto había arrancado sin problemas e iba viento en popa, incluso el ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares lo había anunciado como un éxito gracias a las gestiones gubernamentales.
Sin embargo, como casi siempre pasa, falló la operación política y se detuvieron las construcciones por la inconformidad de unos pocos.
|
Imagínese el absurdo. El gasoducto marino Texas-Tuxpan se detuvo porque un pescador, ¡Sí!, solo un pescador presentó un amparo argumentando que se dañaría el medio ambiente y un juez en Ciudad Madero le concedió la suspensión provisional.
Pese a lo anterior, se sabe de buena fuente que Manuel Bartlett Díaz, Director General de la CFE, se reunió en días pasados con el Presidente de TransCanada, Robert Jones, y se lograron importantes avances para continuar con las obras detenidas incluso por índole social.
En la reunión estuvieron también el director comercial y de desarrollo de negocios, Leonardo Robles, y el director de Asuntos Gubernamentales, Carlos Borunda. |