Sin querer, sin programar y fuera de agenda institucional, el gobernador de Veracruz Cuitláhuac García Jiménez desayunó en la mesa de junto a la que ocupaban en el Restaurante Los Arcos de Belén, allá en Coatepec, los periodistas Alfonso Mora Chama, el caricaturista ‘Chava’ y Everardo Soto, directivos de la Asociación Periodistas Unidos de Coatepec. Al final les concedió un par de preguntas.
Cuitláhuac iba rumbo a Cosautlán y se detuvo a desayunar en el emblemático restaurante del Pueblo Mágico propiedad de Chucho Morales.
Cuitláhuac García hizo su entrada discreta -sin aquel enorme séquito de acompañantes y groseros guaruras de antaño- acompañado solo por dos jóvenes damas auxiliares y acaso tres guardaespaldas. Se acomodaron y saludó a los decentes periodistas que sin imprudencias lo dejaron desayunar. Cuitláhuac pidió un modesto y sencillo desayuno: jugo de naranja, antojitos y café. Ahí platicó por su celular con un diputado federal de apellido Ayala.
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