I. Filtros sanitarios;
II. Regulación tendiente a la disminución de presencia de transeúntes, aglomeraciones y paseantes, a través de la limitación parcial del acceso al centro de los municipios en mención, y
III. Entre otras anunciadas y las que pretendan implementar los Ediles.
De dichas acciones, la única que en verdad puede ayudar es la tercera, y esa se deja a discreción de las autoridades municipales.
El pretender que el virus no se esparza porque se cierra un Centro de una ciudad es una vacilada, lo efectivo es que los negocios no esenciales permanezcan cerrados, que se restrinja la movilidad pero no poniendo barreras físicas sino cerrando lo no esencial para que no haya motivos para salir.
De allí en fuera, el tremendo pico que se está viviendo en estos días por COVID-19 es notorio que se da luego de las reuniones de Navidad y Fin de Año, por lo que se comprueba lo que la mayoría de los estudios serios afirman, y es que hay más riesgo de contagio en reuniones privadas y familiares, que en lugares abiertos y públicos.
La autoridad hace lo que puede y lo que el marco de la Ley y las directrices presidenciales le permite, pero hace falta más, mucho más para detener este terrible virus.
El confinamiento es el único camino viable, o de lo contrario la cuenta se incrementará en miles de muertos más.
El exhorto a las Presidentas y Presidentes Municipales, para que regulen la disminución de presencia de transeúntes, aglomeraciones y paseantes en los centros de los municipios de Actopan, Cazones de Herrera, Espinal, Gutiérrez Zamora, Tecolutla, Orizaba, Papantla, Poza Rica de Hidalgo, San Rafael, Tihuatlán, Veracruz y Xalapa, del jueves 14 al domingo 17 de enero de 2021, en un horario de 07:00 a 18:00 horas; es a todas luces insuficiente.
Es momento que se tomen medidas diferentes, que sean eficaces aunque sean dolorosas. Si no queremos vernos nuevamente en semáforo Naranja o Rojo, es necesario hacer algo ya, y hacerlo en conjunto con la autoridad y la sociedad en pleno. |