A pesar de lo anterior, no pudo evitar que llegara la notificación de la FGR y se hiciera efectiva, por lo que Ricardo Anaya no tendrá más remedio que acudir ante un juez del Reclusorio Norte (mismo en el que se encuentra el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte).
El hecho es que si Ricardo Anaya se va del país (o ya se autoexilió como él mismo avisó y algunos medios afirman), como el mismo anunció en un video que publicó el lunes de esta misma semana, la FGR estará en posibilidad de girar en su contra una orden de aprehensión y eventualmente emitir una Ficha roja internacional para su búsqueda y captura.
Es decir, Ricardo Anaya, ‘el chico maravilla’, está enredado, tiene todo en su contra y no tendrá de otra que presentarse a declarar en el juzgado que lo solicita y buscar por la vía legal y jurídica su defensa.
El problema es que fueron sus propios compañeros panistas los que lo han acusado de los presuntos delitos por los que es citado a declarar y por otro lado está lo que en su contra ha confesado en declaraciones ministeriales Emilio Lozoya, ex director de Pemex en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Nada fácil la tiene Ricardo Anaya. |