Vaya que ha causado revuelo la última columna del periodista Arturo Reyes Isidoro, y es que aborda un tema que miles de xalapeños habían visto pero que no se alcanzaba a entender como una acción concertada y es el caso de los retenes.
“La extorsión, con el pretexto de los alcoholímetros, ya prácticamente se institucionalizó, pero ahora se ha pasado al asalto, incluso aunque la víctima ya esté llegando a su domicilio, enfrente, como le pasó a conocidos míos”, escribe Arturo Reyes Isidoro y narra la espeluznante situación que vivieron amigos suyos a los cuales, de extorsión en extorsión no solo les sacaron miles de pesos sino que les hicieron pasar un mal rato al mandarlos a los separos de San José.
Terrible situación sin duda.
|
“Una noche, cuatro jóvenes (incluidas mujeres), después de haber salido de trabajar fueron a cenar. Cuando ya volvían a sus hogares, los paró la policía. De entrada, le dijeron al que manejaba que iba tomado. El joven lo negó. Ante la insistencia de la acusación pidió que personal de tránsito le hiciera una prueba. Le dijeron que ese no era el “protocolo””, continúa narrando Reyes Isidoro.
Esta situación, por cierto, parece ya el modus operandi de las patrullas en Xalapa, las cuales ni siquiera tienen que ser viales o de tránsito, cualquier patrulla de policía detiene a los vehículos y con el pretexto de venir “zigzagueando” o inventarles presuntos estados de ebriedad y bajo la amenaza de llevarlos a San José, terminan extorsionando.
Pero mejor no le contamos más, mejor lo invitamos a leer a Arturo Reyes Isidoro y su columna completa aquí. |