Cuánta razón tiene la columnista Elsbeth Lenz al señalar en su columna “La política en rosa”, el triste papel que le tocó al abogado Del Toro, defensor de Karime Macías Tubilla. “Me queda claro que él hace su chamba, pero defender a Karime, debe ser lo peor de su ilustre carrera, ¡Vaya! Incluso peor que defender a Javier Duarte, que por lo menos era cotorro y lo que sea de cada quien, está pagando completito, todo lo que se comió, el tipludo ex gobernante, ha aguantado vara”, señala Elsbeth.
Y sí, el querer defender lo indefendible debe ser muy complicado, al grado de señalar que la pobre Karime está siendo objeto de una persecución política y que incluso lo que hizo Miguel Ángel Yunes Linares al exhibir el famoso diario en el que escribió Karime “Merezco abundancia”, es la prueba fehaciente de el escarnio público al que se ha querido someter a la pobrecita madre abnegada.
Ahora resulta, según el abogado Marco Antonio Del Toro, que Karime no se refería a la abundancia financiera… sino a lo espiritual… ¡Sí chucha!
|
También, según Del Toro, la pobre Karime vive modestamente en Inglaterra, sin lujos, y que sus hijos van a escuela pública, que está impedida para trabajar y que se mantiene de lo que solidariamente le mandan sus familiares para su manutención.
No, no es que a Karime y a Javier Duarte se les haya hecho un linchamiento mediático y que sean objeto de una persecución política… lo que pasa es que no solo fueron cochinos, sino que también fueron trompudos.
En Chihuahua los indígenas de la región piden “Kórima”, que no es pedir limosna, sino que significa “Tú que tienes, comparte conmigo que no tengo”.
Sólo le faltó decir a Del Toro que él la defiende pro bono, o que le cobra muy barato, que Karime tiene una Beca Benito Juárez y que así se sostiene, y pedirle al público “kórima” para la pobrecita Karime. |
